UN CAFÉ CON... Victor H. Castañeda Soto

Presidente del Comité Directivo Estatal del Partido Acción Nacional (PAN).

Victor Hugo Castañeda (VHC) se describe como un presidente con los días contados al frente de su partido. Acepta su parte de responsabilidad tras la derrota de 2013, pero asegura no ser el único y manda mensajes a quienes han causado divisiones. Ofrece disculpas a los verdaderos panistas y hace hincapié en que el partido debe volver a sus raíces para diferenciarse del PRI.

-Para el panista VHC, ¿ya están digeridas las derrotas del 2012 y 2013?

Digeridas sí. En lo personal ha sido difícil, no lo niego. En lo político tiene que ver más con la institución y la reestructura del propio partido. El partido se está reconstruyendo; no supimos digerir la derrota de 2012. Hubo desbandada; no supimos lidiar con las post derrota y ese fue el gran error.

-¿El PRI regresó a Los Pinos por los errores del PAN o por el efecto EPN (similar al de Vicente Fox en 2000)?

Una combinación de errores. Tuve el privilegio de participar en una comisión de 20 panistas a nivel nacional para analizar y debatir lo que había ocurrido tras la derrota de 2012 y yo destacaría cuatro sucesos: el tema del combate al crimen organizado, que nos afectó mucho. Los indicadores macroeconómicos mundiales, el tema del desempleo y una gran división al interior del PAN que, lamento decirlo, ahondó Josefina Vázquez Mota con la frase “soy diferente”. Cometió el error de desmarcarse de Felipe Calderón Hinojosa (FCH) cuando mejor estaba calificado y fue ella quien marcó la separación al interior del partido.

-¿Por qué ahora el PAN se ha convertido en el mejor aliado de Peña Nieto?

Tu premisa es falsa. No la acepto. Cuando Vicente Fox ganó pidió quitarle el freno al desarrollo del país y el PRI en una actitud mezquina se dedicó a bloquearlo a él y a FCH. ¿Qué es lo que hace el PAN ahora? Se despoja de esa mezquindad y prioriza los resultados aunque otros se cuelguen la medalla, como lo hizo Enrique Peña Nieto (EPN). El PAN ayudó a sacar reformas trascendentales que dejó pendientes FCH.

-¿Entonces por qué quejarse después de lo que aprobaron?

El PAN jamás estuvo de acuerdo en la Reforma Hacendaria. Ningún diputado y ningún Senador del PAN votaron a favor de ese adefesio de reforma...

-...Estaba dentro del Pacto por México.

No, esa no estaba. Te reto a que lo busques. Estaban 96 puntos y esa no estaba. Esa fue obra de EPN y el PRI, pero no estaba. El PRD le entró porque le dieron un “moche” a Miguel Ángel Mancera; le ofrecieron la Reforma Política del DF y le dieron recursos a los gobernadores perredistas. Se engancharon y el PRD se dividió.

-¿Qué sientes cuando dicen que el PRI y el PAN son lo mismo; cuándo los llaman el “PRIAN”?

Una frase con falta de creatividad que me da flojera. En la política hay que negociar, como en el matrimonio. El hombre cede y la mujer cede. En política se cede para construir, siempre y cuando sea en público y transparente, no debajo de una mesa ni tras bambalinas. Es cierto que hay una suma del PRI y PAN para sacar adelante reformas pero eso no nos hace malos o perversos. Es una alianza coyuntural para sacar estas famosas reformas que le han dado fama internacional a EPN y que no lo merece pues no son de él, pues es un personaje muy limitado.

-En lo local, ¿a qué crees que se debió la derrota de 2013?

Hay que ser sinceros. Asumo la responsabilidad que me toca de la derrota del 2013, pero no es una derrota única de VHC. La historia nos juzgará. Pero hay un trabajo de fondo donde seguramente hubo errores...

-...¿Cómo la alianza con Gonzalo Yañez?

Eso dice Jorge Pérez Arellano y lo respeto...

-...¿No vas a reconocer que te equivocaste con el PT?

Yo compré la estadística del 2010 donde el Partido del Trabajo traía 59 mil votos. Intentamos que se sumaran Movimiento Ciudadano y el PRD pero no se pudo. La votación de Durango capital para el PAN fue más alta en 2013 que en 2010. Yo ofrezco una disculpa a panistas, verdaderos panistas, que se sintieron ofendidos por esa alianza. Yo lo hice con una clara convicción de ganar la alternancia electoral en Durango capital por lo menos. No de mala fe, no “centaveado”, no doblado, no amenazado como se ha dicho. Lo hice por una convicción. No le he hecho daño a nadie.

Reitero mis disculpas a honorables y viejos panistas que se sintieron agredidos, pero se les olvida a esos panistas que, el PAN del 86 se alió con el PRT y el PSUM. Nos aliamos en ese entonces con la izquierda, no es la primera vez pues.

Asumo mi responsabilidad, pero agregaría la parte medular, también influyó una ley electoral parcial, facciosa, de los años 80’s que “pomposamente” se le regaló a Durango en su 450 aniversario y que permite la sobrerrepresentación; la intervención del Estado fue brutal.

-¿Cuáles será tu más grande herencia al panismo?

Estas hablando con un presidente en “artículo mortis”, cosa que me encanta, poco falta para que me den los santos óleos. ¿Qué dejo? Una semilla de volver a los orígenes del PAN. Para mí es importante haberle dado varias vueltas al estado con ese propósito: volver a diferenciarnos del PRI. Regresar al ADN del PAN. Ahí está la semilla que habrá de resurgir. Ha sido difícil, desgastante, es un partido convulsionado, pero debo decir que ha sido un gran honor.

-Te irás al DF a ayudar a la campaña de Gustavo Madero. ¿Te gustaría estar en 2015 o 2016 buscando un puesto de elección popular?

Esa una especulación de los columnistas (risas). Si Gustavo Madero decide buscar la reelección y decide invitarme ya tomaré una decisión. Y le diría a José Antonio Ochoa que no se preocupe, que se ocupe de sus menesteres. Yo seré muy respetuoso en tiempos y formas para los cambios en el CDE. Pero sí, si me llega una invitación es altamente probable que la acepte y sí, si te diría que me vería de candidato en 2015. Habrá que ver ciertos detalles.

Currículum

Licenciado en Psicología por la Universidad Juárez del Estado de Durango; tiene, además, formación en Derecho y Comunicación. Ha sido diputado local en tres ocasiones y fungió como Director de Comunicación Social de la Secretaría de Turismo Federal, en la gestión de Rodolfo Elizondo Torres.