Durango: su cielo y su gente
Un lugar mágico enclavado en la Sierra Madre Occidental, de -la Sierra de El Nayar-, en el municipio de Durango, se encuentra la impresionante cascada de El Salto del Agua Llovida, un paraíso que como duranguenses debemos estar orgullosos de contar con espectaculares paisajes naturales.
Es una impresionante cascada azul turquesa de casi 100 metros de caída libre, que la forman los arroyos Las Playas y El Infiernillo, afluentes de la Cuenca Alta del Río Acoponeta, que descarga sus aguas en la costa del Océano Pacífico en el estado de Nayarit. Al chocar los vientos al suroeste con la caída del agua, forman una brisa que baña a los visitantes y al atravesar los rayos del sol en el agua observarán el arco iris.
Su clima es templado-frío. En su vegetación hay ejemplares de árboles de cedro blando, cahuite, pinos, encinos, madroños y los tázcates. También encontrarán musgos y helechos adheridos a los troncos de los árboles y sobre las piedras.
Entre la fauna, observarán venados corriendo sobre las montañas y aves de estancia temporal anual que se dejan ver iniciada la primavera como son ejemplares de guacamayas verde.
Para llegar hasta El Salto del Agua Llovida, son 144 kilómetros de la ciudad hasta este bello lugar, por la carretera Durango-Mazatlán. Son 60 kilómetros hasta Navíos, luego una desviación a la izquierda para entrar a una zona de carretera y parte de terracería hasta llegar a la comunidad de San Isidro y de ahí se recorre una hora más, aproximadamente.
La entrada tiene un costo de 50 pesos por persona. Hay miradores, asadores y cuenta con tirolesa y espacios de recreación. Todo una aventura para los amantes de la naturaleza.
La comunidad de San Isidro pronto abrirá un moderno hotel que, al igual que Molinillos para los visitantes, contará con todos los servicios.
Recuerden: si desean conocer más lugares de Durango, les recomiendo entrar al blog www.quebonitoesdurango.blogspot.mx.