La fiesta se vive en la Charrería

Lo que en el tiempo de la Colonia, los charros tenían que hacer en el campo o en las haciendas, ahora es el deporte Nacional por Excelencia, en donde desde muy temprana edad se observa la valentía de los mexicanos.

Nueve suertes le dan vida la Charrería. En Durango se lleva a cabo el Torneo XXIII Nacional Infantil, Juvenil y Escaramuzas. Los aficionados disfrutan cada competencia, ya que los charros dejan alma, vida y corazón tanto en la manda como en el lienzo.

Quien ha dejado con la boca abierta a propios y extraños es Sebastián Perea del equipo Chilchota La Laguna, quien dentro de la competencia de Charro Completo, ha tomado la posición de honor.

Sebastián, después de haber realizado las nueve suertes, en donde realizó dos manganas a pie y una a caballo logró cosechar 152 unidades para obtener la primera plaza.

El viernes fue un día de grandes emociones en donde en la competencia de Dientes de Leche, el primer lugar de la competencia del día fue para San Martín caballero, México, quienes gracias a su trabajo en equipo consiguieron 188 unidades.

Por su parte, el Rancho Puente de la Cruz de San Luis Potosí realizaron sus suertes para llegar a los números de 180.

Los duranguenses de Cristo Rey La Picota no tuvieron la tarde que ellos hubieran querido y terminaron su labor con 36 puntos.

EMOCIÓN

En cuanto a las acciones de la división Infantil A, Huajuco Oritos, Nuevo León fue el equipo que dejó la piel "chinita" y el nudo en la garganta al ver el talento de los niños charros.

Los nuevo leoneses cosecharon 242 unidades en una demostración de arte, talento y dinastía.

Con 187 puntos, la Tapatía de Charros de Jalisco concluyó su labor del sábado.

El San Martín Caballero cosechó 137 puntos.