Cruz Azul come Tiburón

Cruz Azul sobrevivió a sí mismo, para terminar derrotando apenas, apretando los dientes, a un pobre Veracruz por 5-3 para mantener así vivas las esperanzas de entrar a la Liguilla.

Después de una primera parte de infarto en donde prácticamente el cuadro cementero se "hizo" dos goles en contra, para la segunda parte se allanó el camino, sin ponerse traspiés, para liquidar el juego ante un voluntarioso pero muy corto cuadro veracruzano que con la llegada de Juan Antonio Luna a la dirección técnica, en lugar de Pablo Marini, salió de la capital eliminado en la Copa MX por América y en penúltimo sitio en la Liga.

La semana al final fue positiva para los Cementeros, ya que salieron vivos de la casa de los Tigres de Monterrey, calificaron a los cuartos de final del torneo copero y se metieron en la lucha por clasificar al llegar a 15 puntos, aún sin poder asegurar nada.

Mas la realidad es que este juego no puede tomarse como mucha referencia por lo pobre del rival. Veracruz llegó con la idea de aprovecharse del mal sicológico de los azules, que desconfían hasta de su propia sombra y no son capaces de tener un juego tranquilo, en paz.

Hasta los infalibles como Jesús Corona ahora fallan en este equipo, que al mismo tiempo hace grandes atajadas, dignas de un portero de selección, que hace pésimas salidas, dignas de un portero novato.

Y de la defensa ni hablar. La estatura y la experiencia de la zaga fue evidenciada por el ataque tiburón, lleno de coraje, pero poca calidad.

Apenas al minuto 10, después de una atajada de Corona, vino el descuido del "Cata" Domínguez que se dejó ganar la posición por Mathías Cahais para dar la ventaja a los escualos.

"Chaco" disparó y el balón dio en la mano de Peñalba para que se marcara penalti. El propio Giménez lo convirtió en gol a los 28'.

Diez minutos después vino la mejor jugada del partido con una combinación entre Guerrón y Joao que Rojas concretó después de quitarse de enfrente a toda la defensa visitante, con el portero incluido.

Parecía que todo volvía a la normalidad pero no, Cruz Azul se volvió a hacer la vida difícil cuando Corona fue a cazar topos donde no debía, lo que provocó que dejara la cabaña abierta para el gol del empate de Juan Albín.

Parecía venirse la tormenta y ser otra tarde de miseria para los cruzazulinos, pero al iniciar el segundo tiempo, 46', Joao, a centro de Rosario Cota, anotó el tercero de forma sencilla.

 EXPULSIÓN

La luz salía en el Azul cuando a los 59', Peñalba se iba expulsado, en forma exagerada por el árbitro César Ramos.

 CIERRE

Cruz Azul aprovechó y tres minutos después Joao fue derribado por Leo López para que se marcara otro penalti. El "Chaco" se volvió a enfilar y a anotar a los 63 minutos.

Ahora sí, no había nada que perturbara la paz azul, más que ellos mismos. De nueva cuenta la zaga aflojó y Leo López acortó a un gol la diferencia a los 78 minutos.

Con un hombre más en la cancha Cruz Azul volvió a su costumbre de sufrir, sudar y correr por su vida.

Veracruz lanzó lo último que tenía pero no fue suficiente.

El "Conejo" Jorge Benítez, quien entró de cambio, anotó el quinto de los azules en tiempo de compensación.

La Máquina se ensañó con el Veracruz y le metió cinco goles.

Los celestes ahora sí pudieron culminar la obra, aunque sufrieron ante 10.

"Chaco" Giménez anotó dos penales ante el Veracruz.