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La franquicia Morena, S.A. de C.V.

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La franquicia Morena, S.A. de C.V.

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IVÁN SOTO HERNÁNDEZ

Que el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) es algo así como una franquicia, no suena tan descabellado después de analizar cómo surgió, cuánto ha crecido, quién es el dueño y qué objetivos persigue.

Mucho menos suena tan extraño que Morena pudiera ser una marca que se adquiere, o se alquila, sobre todo después de ver las sorpresas en los nombres de quienes logran asumir su dirigencia en los estados y municipios donde la firma de la empresa se expande.

En el vecino estado de Coahuila, por ejemplo, el partido que dice luchar contra las mafias políticas del poder en México, el partido que se dice promotor de las causas de los más desprotegidos, ha postulado a un millonario como candidato a gobernador.

Armando Guadiana Tijerina, empresario del sector industrial, productor ganadero y quien además es el principal promotor del deporte taurino en toda esta región del país, medirá fuerzas con el panista Guillermo Anaya Llamas y el priista Miguel Riquelme Solís.

Cualquiera pensaría que Don Armando se ve débil al competir desde un partido inexistente contra los candidatos de dos institutos políticos que tienen estructura, bases, fuerza y recursos.

Sin embargo, dicen los cercanos que Guadiana ve con mucho futuro las inversiones que ha empezado a hacer en el partido de Andrés Manuel López Obrador, porque la franquicia la ha hecho crecer él y nadie más.

Y aunque es muy pronto para salir del tercer lugar en donde lo ubican las encuestas, evidentemente, al empezar a competir con una base de 16 ó 18 puntos postulado por el partido Morena, que en Coahuila no pinta, pareciera que es quien tiene más oportunidad de crecer. Los otros dos están en su tope.

En Durango, hay señalamientos que provienen de los diversos grupos políticos, quienes coinciden que la franquicia de Morena pudo ser depositada en gente ligada al ex gobernador Jorge Herrera Caldera.

De hecho, de manera pública la alcaldesa de Gómez Palacio, Leticia Herrera Ale, ha dicho que es Antonio Herrera Caldera, hermano del ex gobernador, quien tiene tales derechos y a eso atribuyen en La Laguna la llegada de gente como Alfredo Martínez a la dirigencia municipal de ese partido.

Los comentarios han subido de tono y las especulaciones aún más, pues son muchos los que creen que en las siguientes semanas se irán sumando adeptos a Morena de diferentes orígenes político-partidistas, pero la mayoría de ex priistas y aliados.

Así, se menciona en los cafés que en Durango iremos viendo nombres como Manuel Herrera Ruiz, Ernesto Aviña, Salvador Quintero, Nancy Vázquez, Cristian Salazar, Antonio Vázquez, Iván Gurrola, Karol Martínez, Otniel García y otros.

Unos abiertamente dentro, otros disimuladamente apoyando -se dice- el crecimiento de la causa de AMLO rumbo a 2018.

Lo cierto es que, para nadie es sorpresa referir al Movimiento de Regeneración Nacional como una franquicia o una marca que solamente tiene un dueño: López Obrador, y algunos socios en el consejo de administración: sus hijos.

Ellos son José Ramón, Gonzalo y Andrés Manuel, los tres de apellidos López Beltrán, a quienes no solamente les heredará algún día un partido como si fuera patrimonio familiar, sino que, por el momento, ya los hizo líderes de Morena en las zonas con más electores: Estado de México, Tlaxcala y Ciudad de México, respectivamente.

En Durango hay gente valiosa que ha estado en el movimiento lopezobradorista desde que se postulaba éste por el PRD. Gente como Carlos Medina Alemán, quien se ostenta siempre como gente a favor de la causa de AMLO, tenga o no tenga membrete de partido.

Sin duda habrá otros grupos e intereses políticos que irán sumándose a Morena, como sucede con un segmento de priistas laguneros que han hecho la misma "operación fuga" de los capitalinos.

Resulta entendible, aunque quizá para muchos no precisamente sea aceptable o éticamente correcto, puesto que en el PRI a muchos se les irán cerrando las puertas cada día más, así como les está pasando a los ex panistas que se la jugaron contra Aispuro en 2016.

Aunado a ello, tendría que ocurrir un milagro para que el PRI se reponga o el PAN ofrezca una candidatura atractiva rumbo al 2018. Y tendría que ocurrir algo extraordinario para que se le caiga esta vez a AMLO el triunfo en la elección presidencial.

En esas condiciones, es lógico que crezcan las filas de Morena. Más aún si los asesores de López Obrador le supieron al tema como para poner en marcha un partido franquiciante, en el cual sea sencillo darle responsabilidades de financiamiento y resultados a cada franquiciatario, y así todos sacan su parte del negocio. Simple.

Envíame tus comentarios a [email protected].

Escrito en: ComuniK2 partido, franquicia, López, quien

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