Así era la bomba usada en el ataque en Mánchester
Un atentado al término de un concierto en Mánchester, el pasado lunes, dejó 22 muertos y decenas de heridos. La bomba detonada, según se ha revelado, era potente y sofisticada, diseñada para causar el mayor daño posible.
De acuerdo con el New York Times, no se ha podido determinar aún la cantidad o el tipo de explosivo del que estaba compuesta su carga, pero se deduce que se fabricó “tras una profunda reflexión y con cuidado”.
La bomba, según análisis hechos por especialistas en manejo de explosivos, era “potente, dotada de una carga ultrarápida” y su “metralla fue dispuesta con cuidado y metódicamente para causar el mayor daño posible”.
Era capaz de causar devastación en un gran semicírculo, en el que se encontraban las víctimas, y tenía un detonador poco habitual, con un pequeño circuito impreso y no un simple interruptor, como normalmente ocurre, lo cual podría ser evidencia de que había un retardador o incluso un receptor para activarlo a distancia.
En cuanto a su batería, se encontró que era más potente que las usadas normalmente en este tipo de artefactos.
Todos estos detalles, concluyen los expertos consultados por el Times, sugieren que el atacante buscó disponer de distintas opciones que permitieran activar el explosivo.