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Calidad en el servicio

Pura Intuición

RAFAEL ALARCÓN

Viene una época de selección de candidatos de elección popular en donde personajes con una historia asombrosa, siempre para el sistema, serán eficientes por más diferente que sea la función o trabajo que vayan a desarrollar y por los intereses políticos, por arte de magia, pueden desarrollar otro por diferente que sea, y consecuentemente todo su equipo de trabajo tiene asegurada una chamba independientemente de sus habilidades y van asegurar trabajo en el servicio público.

Cuantos de nosotros hemos tenido que acercarnos a una de las oficinas de la administración pública a efecto de realizar algún tipo de gestión, y siempre pedimos una explicación de tanto requisito o trámite que se requiere.

Todos hemos palpado o avizorado el panorama desde el punto de vista como un usuario, administrado y/o funcionario o servidor público, la realidad de muchas de las entidades del Estado hay personal poco idóneo, poco capacitado y lo más lamentable puestos donde los jefes que aun con experiencia no se otorga el servicio y la atención como la debe de recibir un ciudadano.

Ello es una diáfana respuesta a la elección de los adecuados administradores públicos que ejercen por lo que son los denominados "especialistas", quienes desde su designación asumen el reto de administrar adecuadamente los recursos del Estado y ejercer escrupulosamente la función pública, razón más que suficiente para ser más exigentes y minuciosos, al permitir su ingreso a la administración pública, y no distorsionar los objetivos planteados por cada entidad bajo favorcitos que se pagan a la inmediata asunción de sus cargos.

Referirnos a la administración pública es describir el manejo de una administración simplemente experta, como un negocio que se emprende en el que pones todo tu capital con el objetivo de lograr prosperidad, y para ello deberá poner su mejor esfuerzo y te rodearse de personal idóneo, eficiente y responsable.

Sería absurdo contratar a un practicante, o un principiante para la administración de tu empresa, y con ello no se pretende discriminar a ningún profesional, si no que se pretende es que la administración pública reaccione frente a una situación lamentable en la que como sociedad estamos inmersos y como País, merecemos prosperar mejorar, ofrecer seguridad y confianza en nuestras instituciones púbicas, y no ser conocidos por actos de corrupción y de impunidades.

El desarrollo humano es considerado hoy, factor más importante en la determinación del grado de eficacia en las organizaciones, cualquiera sea el producto o servicios que estas presten. Por lo tanto una política de mejoramiento de los recursos humanos tiene una alta prioridad en toda organización.

Las actuales teorías sobre las organizaciones han aportado esta nueva visión para la revalorización de los de las personas dentro de las mismas y se ha lo enunciado con el slogan la organización es su personal.

De allí que el funcionamiento de una institución, tiene mucho que ver entonces con el conocimiento, las habilidades, el trabajo en equipo, los procesos de desarrollo, la creatividad, la innovación, la experiencia, las interrelaciones y las actitudes de las personas que la conforman.

Cuando la organización en cuestión es la Administración Pública, es necesario contar con una organización objetiva, profesionalizada, más eficaz y eficiente, que pueda cumplir con la prestación de los servicios demandados por los ciudadanos.

En el sector privado, cuando el personal ingresado no responde a las necesidades del puesto de trabajo, la organización pierde tiempo y dinero, pero existe la posibilidad de decidir un despido y reiniciar la búsqueda. En el caso del sector público, pasado el tiempo asignado para la provisionalidad y confirmado en el cargo, el agente adquiere estabilidad y sólo puede ser despedido mediante la implementación de un sumario administrativo.

Por otra parte, los recursos invertidos en capacitación no dan los frutos esperados cuando no se ha seleccionado personal con determinadas competencias. Se acentúa esta problemática ante las dificultades que regularmente existen en el sector público para la rotación de personal entre los distintos organismos.

Si bien una gran mayoría de estatutos declaman en sus textos que el ingreso se hará a través de un proceso de selecció muchas veces es por recomendación o compromiso político Y cuando se presentó la necesidad de cubrir distintos puestos de trabajo se recurrió a los contratos de locación de servicios, becas y pasantías como alternativas válidas para superar la falta de personal.

Con el tiempo estas modalidades de contratación, por presiones gremiales o decisiones políticas, se transformaron en ingresos a la planta permanente. Actualmente al descongelar las vacantes, existe la posibilidad de seleccionar personal adecuado para responder a los objetivos institucionales y planes de gestión de cada organismo.

Un buen proceso de selección se inicia definiendo correctamente los primeros pasos, dejando en claro las expectativas del área solicitante y las reales posibilidades de la organización de satisfacerlas.

En la mayoría de las organizaciones públicas estas especificaciones no están actualizadas y muchas veces ni siquiera están escritas, lo que dificulta la tarea de definir el tipo de personal que se requiere.

Es mi intuición que no solo es bueno tener certificados de calidad sino actuar con calidad ante el ciudadano que finalmente es que paga el salario a través de sus impuestos.

Escrito en: Pura Intuición personal, administración, organización, trabajo

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