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OMAR ORTEGA SORIA

Tráigame 3 copias de su identificación oficial, comprobante de domicilio con una antigüedad no mayor a 2 meses, acta de nacimiento en el nuevo formato, curp, rfc, una fotografía... esto forma parte de un gran número de conversaciones al momento de realizar un trámite gubernamental, lo peor es que ya estamos acostumbrados, sabemos que perderemos nuestro tiempo, y que incluso, si cometemos un pequeño error, tendremos que volver otro día, y todo esto, sin tomar en cuenta los malos tratos o la corrupción que provoca.

Muchos gobiernos se han dado cuenta de cómo sus interacciones con sus gobernados son nefastas, desde pagar impuestos, multas o abrir un negocio, por lo que han implementado diferentes modernizaciones administrativas, desde darle al ciudadano la oportunidad de que haga sus trámites a través de internet, hasta motivar y capacitar a sus empleados para que brinden un servicio más ágil y atento, al punto de lograr diferentes certificaciones.

Según la Comisión de Mejora Regulatoria, en nuestro país tenemos 150 mil regulaciones vigentes emitidas por autoridades de los distintos órdenes, funciones y niveles de gobierno, y por supuesto que lo único que hacen es generar trámites burocráticos lentos y engorrosos, 130 mil según algunos cálculos, que al final impiden el funcionamiento eficiente de nuestra sociedad o incluso de nuestra economía, al dificultar la instalación de nuevos negocios.

Cerca de la mitad de las empresas gasta 50 mil pesos al año para cumplir con el marco regulatorio actual, además un 64% cae en actos de corrupción para agilizar trámites, un 39% para evitar multas o sanciones, y el 30% para obtener licencias o permisos. Y esto tan solo se refiere a las empresas, todavía falta sumar todo lo que padece el ciudadano común y corriente.

Por lo anterior, ha sido muy importante el esfuerzo de diferentes sectores empresariales, académicos y actores de gobierno para impulsar desde la vía legislativa, la implementación de la mejora regulatoria. El camino va desde la aprobación de la facultad para emitir una ley general, pasando por la propuesta hecha por el Presidente Peña Nieto para expedir dicha ley, hasta su aprobación avalada por los Diputados, por lo que únicamente es necesaria la revisión de los Senadores.

La futura ley de mejora regulatoria, en pocas palabras, brindará seguridad jurídica, al tener reglas claras con trámites simples, transparentes y predecibles. Para esto, se basará en un sistema nacional de mejora regulatoria para coordinar a todas las autoridades, se implementará un catálogo nacional de regulaciones, trámites y servicios, con lo que se homologará la implementación de la política de mejora regulatoria en todo el país, al mismo tiempo que incentivará la participación de la ciudadanía al fortalecer mecanismos de consulta pública.

No se trata de eliminar todas regulaciones, el objetivo es que únicamente existan aquellas que demuestren su necesidad, que sean claras y que no dependan del humor del burócrata, al

Mismo tiempo que privilegien las nuevas tecnologías de la información. Desde 2008 se hace el concurso para que los ciudadanos denuncien el trámite más absurdo, va mi deseo que con la próxima aprobación de dicha ley, dicho concurso desaparezca.

Twitter: @omarortegasoria

Escrito en: Pulso Legislativo trámites, mejora, diferentes, aprobación

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