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El maltrato de Trump a Puerto Rico

El Reporte Oppenheimer

ANDRÉS OPPENHEIMER

Seis meses después de que el huracán María azotara Puerto Rico, lo que muchos de nosotros sospechamos entonces acaba de ser confirmado con datos del gobierno: Trump envió mucha más ayuda a las víctimas del huracán Harvey en Texas que a las de Puerto Rico, aunque la isla sufrió pérdidas mucho mayores.

Poco después del huracán que barrió con Puerto Rico, recibí muchas críticas de los partidarios de Trump por criticar la "tardía y poco entusiasta" respuesta del presidente a la crisis humanitaria de Puerto Rico. Añadí que Trump "parece ajeno al hecho de que las 3.4 millones de personas que viven allí son estadounidenses".

Basé esa columna, entre otras cosas, en el hecho de que Trump visitó Texas dos veces durante los primeros ocho días después del huracán Harvey, y Florida cinco días después del huracán Irma, mientras que le tomó casi dos semanas poner el pie en Puerto Rico después del huracán María. Y cuando Trump finalmente visitó Puerto Rico, ofendió a muchas víctimas al arrojar toallas de papel juguetonamente a la multitud.

Pero ahora, seis meses después, Politico.com ha publicado un detallado informe que confirma el doble estándar del gobierno de Trump con los huracanes en Texas y Puerto Rico. Entre los datos oficiales citados en el artículo:

- Nueve días después de cada uno de los huracanes, FEMA -la agencia gubernamental encargada de ayuda en desastres naturales- había aprobado $141.8 millones en asistencia individual para las víctimas en Texas, mientras que apenas $6.2 millones para las víctimas en Puerto Rico.

- Durante los primeros nueve días después de cada uno de los huracanes, FEMA entregó 5.1 millones de cajas de alimentos a Houston, pero solo 1.6 millones a Puerto Rico.

- Nueve días después de cada uno de los huracanes, el gobierno federal había enviado 30,000 trabajadores a Houston, pero solo 10,000 a Puerto Rico.

- Setenta y ocho días después de cada huracán, FEMA había aprobado el 39 por ciento de las solicitudes federales de víctimas del huracán en Texas, mientras que solo el 28 por ciento de las víctimas del huracán en Puerto Rico.

- Seis meses después de los dos huracanes, FEMA había enviado fondos federales para más de una docena de proyectos de reparación de escuelas y carreteras en Texas, pero aún no había financiado un solo proyecto de trabajo permanente en Puerto Rico.

FEMA dijo en un comunicado que "rechaza categóricamente la idea de que Puerto Rico recibió un trato diferente". Añadió que "hubo desafíos reales en Puerto Rico que tuvieron que superarse, incluida una infraestructura obsoleta, una red eléctrica deteriorada y problemas de liquidez".

"Cada desastre es diferente", me dijo el portavoz de FEMA William Booher. "Es mucho mas fácil enviar recursos a una zona de desastre en Texas que a una isla a 1,000 millas de distancia".

Puede que hayan existido circunstancias atenuantes. Pero estas circunstancias serían mucho más creíbles si no fuera por el hecho de que los puertorriqueños no pueden votar en las elecciones de Estados Unidos, y el que Trump ha demostrado una y otra vez su desdén hacia los latinos.

Este es el presidente cuyo principal tema de campaña fue construir un muro con México, que afirmó falsamente que la mayoría de los inmigrantes indocumentados mexicanos son delincuentes y violadores, que dijo que un juez nacido en Estados Unidos no era apto para tratar un caso "porque es mexicano" y que fue citado describiendo a El Salvador y Haití como "países de mierda".

Y es el mismo presidente que acaba de ordenar al censo de Estados Unidos que pregunte a las personas si son ciudadanos de este país, lo que dará como resultado un menor conteo de los hispanos, una reducción de fondos para sus escuelas y hospitales, y a largo plazo, la disminución de su representación en el Congreso.

Considerando lo dicho y hecho por Trump, es difícil excluir el desdén -o el racismo- como una de las principales causas de su respuesta tardía a la tragedia de Puerto Rico. Si algo se parece a un pato, nada como un pato y suena como un pato, lo más probable es que sea un pato.

El corresponsal extranjero y columnista de The Miami Herald y El Nuevo Herald

Escrito en: el reporte Oppenheimer Puerto, después, huracán, Trump

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