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Movimientos Incorruptibles

No Hagas Cosas Buenas...

ENRIQUE IRAZOQUI

En los hechos ayer acabaron las campañas. Ya empezó el mundial y si de por sí el resultado está casi definido, ahora con la Copa del Mundo gran parte del electorado nacional estará mucho más pendiente de las rotaciones del entrenador Juan Carlos Osorio que de cualquier propuesta que lancen los candidatos presidenciales del aquí al primero de julio.

La última escala importante de la presente campaña presidencial tuvo lugar el pasado martes en Mérida, Yucatán, donde se llevó a cabo el último de los tres debates presidenciales.

Con una agenda más general, a diferencia del celebrado en Tijuana donde el tema migratorio fue el asunto toral a tratar, en esta ocasión tres candidatos presidenciales tuvieron la oportunidad de plantear sus propuestas, como fue el de Ricardo Anaya, José Antonio Meade y Jaime Rodríguez Calderón, mientras que el caso de Andrés Manuel López se dedico a deambular, ya que se sabe ganador de la contienda.

También fue la ocasión donde los ataques tuvieron por primera vez cierto impacto si no en las preferencias electorales, sí al menos en el prestigio del candidato que se ostenta inmaculado.

José Antonio Meade logró evidenciar que el Peje no está exento de quizá hasta involuntariamente, verse relacionado en situaciones embarazosas, que lo apartan de ese halo que él piensa poseer de intachable. En el fragor de la discusión del debate, le fue señalado que el ingeniero Javier Jiménez Espriú a quien el candidato de MORENA ha designado para ocupar la cartera de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes en caso de ganar, es accionista de una empresa que tiene una asociación con la empresa brasileña Odebrech, cuya reputación de corruptora de políticos en Latinoamérica es ampliamente conocida.

Ante el señalamiento, López apeló a su incorruptibilidad y negó el dicho de Meade. Sin embargo, al día siguiente se estableció que si bien Javier Jiménez no tiene nada que ver él con esa empresa carioca, su esposa y cuñados sí son accionistas de una sociedad anónima que tiene una alianza con la famosa empresa corruptora sudamericana. Vaya chasco para don Andrés.

No fue todo. En otro momento, ahora fue el candidato panista quien aprovechó para acusar el sempiterno candidato que cuando fue Jefe de Gobierno de la Distrito Federal, asignó de forma directa contratos de obra por más de 170 millones de pesos a las empresas del señor José María Rioboó, obviando licitación pública. Ricardo Anaya acusó que el Rioboó fue el constructor consentido de Andrés Manuel y mostró un par de fotos donde aparece el peje y el constructor. En la primera los señalados están sentados viendo papeles en una mesa, en la segunda imagen aparecen caminando en un predio que presuntamente son los terrenos donde se construye el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México, donde el señor Rioboó concurso para construir las pistas de aterrizaje por un monto de mil millones de pesos, pero al no verse favorecido logró montar a AMLO para encabezara una campaña en contra de la construcción del nuevo puerto aéreo.

Igualmente, se comprobó que efectivamente el gobierno capitalino que encabezó López Obrador en la capital del país sí asignó directamente los contratos a José María, hecho que si bien no prueba ilegalidad de suyo, sí queda claro que no siempre AMLO es perfecto. Tal vez se le fue ese detalle de la obra que se le dio a Rioboó.

Con las campañas concluidas para efectos prácticos, lo que dejó esta semana es como un hecho consumado la ventaja que todas las encuestas serias le dan al popular e incansable Andrés Manuel, que supo capitalizar al gran voto de la venganza y de la envidia. La primera fuente de tantos y tantos atropellos que hemos sufrido los ciudadanos en manos de políticos corruptos; la segunda, la envidia es una condición de ser humano común y el hecho de exacerbar con tal maestría ese sentimiento de gran parte de la sociedad tiene a López muy cerca del triunfo.

Quizá lo único que perdió el próximo presidente de México, fue su estandarte de liderar movimientos incorruptibles. Los señalamientos recientes de Jiménez y Rioboó así lo demuestran.

Escrito en: tiene, empresa, López, candidato

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