Pasó de víctima a presunto homicida
Miguel Ángel, un joven de 23 años de edad, nunca pensó que su presunta defensa se convertiría en presunto homicida. El viernes 29 de junio, permaneció en la escena de un suceso que no se imaginó lo llevaría a la cárcel, él estaba seguro que no había cometido ningún delito.
Es el chico arrestado como presunto homicida de Esteban Ubaldo Santillán Amparán, el taxista que murió el domingo en el hospital 1 del IMSS, luego de que según un boletín de la Fiscalía General del Estado de Durango, "varias personas con las que discutió por motivos del servicio" lo agredieron con un bat.
Efectivamente hubo una pelea en el lugar, esto luego de que el chofer trasladara a un par de personas, entre ellas Miguel Ángel, pero a decir del detenido el transportista habría sido quien comenzó a pelear e incluso a agredirlo con el objeto; esa fue el arma con la que supuestamente se cometió el asesinato, pero a decir del joven ese objeto era propiedad del taxista.
Esta versión establece que Miguel Ángel y su hermano tomaron el taxi para ir con la patrona por dinero para comer ya que trabajaban en una obra cerca de la calle Zacatecas de la colonia Morga donde ocurrió el hecho. De regreso a la construcción, le entregaron al chofer 100 pesos de los cuales sobraba; no obstante, el taxista se negó a entregar el cambio, esto con el argumento de que habían dejado sucio el auto, así que uno de los hermanos le pidió una franela con la cual comenzó a limpiar, tras eso le volvió a pedir el dinero, pero nuevamente la respuesta fue negativa. Así, comenzaron a discutir a palabras, hasta que Esteban Ubaldo, hoy occiso, sacó un bat del coche y comenzó a atacar a Miguel Ángel -detenido- pero en un momento dado el objeto se partió y el joven tomó uno de los restos, con este le asestó un golpe al chofer. Asegura que en un brazo, no en la cabeza.
El hombre se desplomó y quedó inconsciente en el suelo, hasta que llegaron los paramédicos de la Cruz Roja para llevarlo al hospital, donde murió el fin de semana. Miguel Ángel fue arrestado en el mismo lugar, ya que no huyó, él pensó que al tratarse de una defensa no procedería como delito pero de inmediato lo vincularon a proceso por lesiones y tras el fallecimiento del hombre se abrió otra carpeta de investigación en su contra por homicidio.