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La Bendición duranguense

El Siglo de Durango platicó con uno de los tripulantes, “Lalo” Morín; Toda una sensación causaron los mexicanos en el Mundial de Futbol

La Bendición duranguense

La Bendición duranguense

JUAN ÁNGEL CABRAL

Una verdadera sensación fue la que causaron los duranguenses en el Mundial de Fubtol Rusia 2018 con la llegada de un autobús decorado con la cultura de México.

El Siglo de Durango platicó con uno de sus tripulantes "Lalo" Morín.

¿De dónde nació la idea de La Bendición?

La idea nace en el Mundial pasado, Brasil 2014, varios de mis amigos de la Bendición fueron allá. Ahí hubo una caravana que se fue desde Monterrey hasta Brasil, y de ahí nació organizarnos para ir a Rusia llevando un poco de nuestra cultura y que Durango se viera por allá.

¿Qué tan difícil fue llegar a Rusia con La Bendición?

Si fue complicado. Mi amigo Daniel Garza fue el que organizó esto. Realizó mucha planeación en logística y permisos. Uno de los temas más complicado fue sacar la licencia de manejo para La Bendición, porque tienes que tener una licencia especial para manejar un camión de más de 3.5 toneladas. Allá se unió al proyecto un chileno, Julio Cepeda, quien vive en Barcelona y tiene esa licencia.

La idea inicial era que llegara el camión a Valencia, pero por la logística no se pudo y finalmente desembarcaron en Alemania y cuando llegó el camión no prendió, debido a un problema eléctrico, lo bueno que Julio es Ingeniero Mecánico y él lo arregló.

¿Cómo te sentiste con la reacción de la gente al ver la Bendición?

Fue otra cosa! Vivo en la Ciudad de México, pero los conozco desde que estábamos en la prepa. Estuve más en contacto con Daniel porque venía acá para realizar algún tramite y cosas así. Desde hace tiempo me comentaron el proyecto y me animé a ir a Rusia.

Viajé solo a Moscú y tome tren para ir a Rostov para el juego contra Corea, que fue donde me integré a la Bendición.

Cuando llego a Rostov, ellos ya iban al partido, llego a la estación y le digo a un taxi siga a ese camión, lo alcanzamos en un alto y ahí me subí, me puse el traje de Chapulín Colorado y fue un recibimiento muy padre, además que ese día llegó Javier, a el chavo que no lo dejaron ir y que al final viajó.

De los lugares que visitaste en Rusia ¿cuál fue el que más te gustó?

Sin duda, Ekaterimburgo, hicimos el viaje de 42 horas sin parar desde Rostov. Ahí nos encontramos con otra caravana que venia de Barcelona, que traían tacos y cochinita, nos paramos a comer y de la nada salieron muchos rusos para tomarse fotos con nosotros, el recibimiento fue increíble.

A parte que nos llevaron a un museo donde tenían carros antiguos, tanques de guerra, submarinos y aviones. Nos dejaron hasta manejarlos

¿Qué pasó en el accidente?

Ese fue reciente, Yo estaba en la Ciudad de México, fue en San Petersburgo, en donde La Bendición tenía la luz en verde en crucero y llegó una moto que se estampo dañando parte de la dirección del camión, pero la gente rusa se portó de maravilla, ya que en día y medio horas se consiguieron las refacciones, porque el camión es de fabricación americana.

¿Qué te dejó viajar está experiencia?

El futbol para nosotros es lo que más nos gusta. Desde niño yo quería estar en un mundial, así que cuando mi amigo me platicó el proyecto dije: tengo que estar ahí.

El estar en los partidos, se ganara o perdiera fue algo muy padre. En ningún otro país que he visitado me he sentido tan orgulloso de ser mexicano, porque por ser de México se nos acercaban para darnos la bienvenida.

La experiencia de estar en La Bendición fue inolvidable porque hasta en los viajes largos nos entreteníamos, llevábamos videojuego y fue una experiencia muy padre.

Escrito en: bendición la bendición estar, camión, Rusia, Bendición

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