Homicidas, 'formados' por el cristal

Aspirar el humo de la metanfetamina y 'prenderse' de ella todos los días hasta perder el control, e incluso la noción de la realidad, ha sido el determinante para ser o no un asesino en Durango, afirmó Ramón Orozco Reyes, comandante de la Policía Investigadora de Delitos (PID) del grupo de homicidios.

El consumo de drogas, especialmente de esta, ha marcado el comportamiento criminal de los últimos dos años y la expectativa es negativa ante el incremento inminente del uso de la 'meta', una sustancia que en los 'puntos' de venta se adquiere desde 20 pesos.

El comandante del grupo de homicidios tiene 15 años de experiencia en el área, reconoce que la mayoría de los asesinatos están relacionados con el robo y el consumo de cristal.

Los escenarios más recurrentes son el de las personas intoxicadas que matan, en riñas o incluso en lapsus psicóticos, asimismo se registra el caso de quienes terminan un robo con el homicidio de su víctima, a quien atracan para drogarse.

"Una cosa lleva a la otra, la gente anda desesperada por conseguir cristal y matan por eso", afirmó.

De 2015 a la fecha los crímenes registran este comportamiento, dijo el comandante que tiene a su cargo un grupo de 15 agentes investigadores, que han resuelto el 85 por ciento de los homicidios del último par de años en la capital, el resto sigue en proceso y son crímenes más complicados debido a que no hay una relación entre la víctima y el victimario.

El año pasado se documentaron 36 homicidios, de los cuales 28 fueron resueltos con la detención de los victimarios, en tanto en lo que va del 2018 se han registrado 19 asesinatos.

PATRONES DEL NARCOTRÁFICO

A pesar de que el comandante sostiene que no hay un vínculo entre los homicidios y el crimen organizado, muchos de los presuntos asesinos reproducen métodos del narco para matar.

Solo se ha identificado un caso relacionado con el crimen organizado, "pero hemos encontrado asesinatos tipo ejecución, o con torniquetes para asfixiar a la víctima, así como cadáveres con mensajes en cartulinas", y ninguno involucra a carteles de la droga.

Lo que sucede es que la llamada narco cultura se ha insertado a grado que quienes matan utilizan técnicas de los sicarios, comentó Orozco Reyes.

Al simular que un homicidio fue por ajuste de cuentas por venta de drogas, desvían la investigación, cuando la mayoría de ellos se originan en el robo e incluso viejas rencillas.

"Quieren hacer creer que son de la delincuencia, pero se ha detenido a todos ellos, y nada que ver".

En los últimos dos años, el 30 por ciento de los asesinos simulan al crimen organizado, aunque por poco tiempo ya que debido a que casi siempre tienen una relación estrecha con la víctima, son identificados. En la investigación, la tecnología ha jugado un papel importante, los Policías indagan en teléfonos y otros dispositivos de comunicación donde siempre encuentran pistas.

Pero, la huella de las muertes financiadas sigue latente.

MUERTES A SUELDO

En 2017, el grupo de homicidios capturó a "Calderón Ríos"-así lo recuerdan- un sicario que mató a dos hombres, uno por mes.

Una de sus víctimas fue Manuel Antonio Carmona Deras, a quien por encargo asesinó de un balazo cuando se encontraba en un coche entre las calles Educación y Pino Suárez de la colonia Burócrata.

El sicario fue arrestado en octubre del año pasado. Otro de sus victimados vivía en la calle Miramar de la colonia Burócrata.

Calderón Ríos cobraba 50 mil pesos, y fue financiado por un desconocido que vivía en Estados Unidos, cuyo destino y situación legal se ignora.

El motivo de los asesinatos eran problemas añejos que el autor intelectual mantenía con los afectados, pero se ignora de que tipo.

En 2015, resolvieron otro crimen, el de un empresario asesinado a bordo de un vehículo blanco en avenida Circuito Interior, era conocido como 'El Bunny'; socio mayoritario del bar 'La Camila', un caso complicado debido a que no existía una relación directa con el victimario, ya que este había sido contratado por otro sujeto.

El asesino a sueldo fue reconocido como Raúl, que en el momento del homicidio tenía 24 años. Fue financiado por Luis Alonso de 29 años, quien le ofreció 30 mil pesos por matar, de los cuales al final solo le entregó tres mil pesos, recuerda el comandante.

En este suceso, el homicida usó una pistola calibre .380. Descubrieron que 'El Bony' le vendió un coche Bora color blanco a Luis Alonso - autor intelectual de su muerte-, "pero quedan mal ahí, y no le paga todo el vehículo, ese fue el problema", narra el comandante.

En venganza contrató al sicario. Actualmente ambos se encuentran en el Cereso 1 de Durango.

Los homicidios en Durango, en el último año han impactado por la intervención de niños víctimas y victimarios o incluso, hijos que matan a sus padres o viceversa.

Mujeres que matan

En el fraccionamiento Joyas del Valle, de la capital, doña Yola' asesinó a 'Isra', y luego se suicidó, el homicidio-suicidio ocurrió en su casa donde vivieron hasta sus 63 y 40 años de edad. Un caso similar se registró en el municipio de Canatlán donde una mujer, más joven, hizo lo mismo con su hijo de siete años, en ambos, se identificó un problema de salud mental. Según el comandante, al menos en el caso de la capital, descubrieron que la señora tomaba medicamento controlado, así que se asume que padecían una enfermedad mental; no obstante, faltó la necropsia psicológica que es necesaria para descubrir las causas del suicidio.

Al respecto el jefe de homicidios, comenta que estos sucesos son poco comunes en Durango, pero cuando se presentan, el comportamiento criminal está marcado por dos líneas: desequilibrios mentales y consumo de drogas.

 LOS PARRICIDIOS

La adicción al cristal ha originado lo casos de parricidios. En la capital el caso mas reciente fue el de Alejandra Berenice "N", de 23 años de edad, quien con apoyo de tres personas mas, mató a su padre Francisco Lucero Ortiz, de 79 años, atacado a machetazos en su propia casa en el fraccionamiento Huizache I.

La chica es adicta al cristal igual que sus cómplices; para comprar esa droga le robó y mató al papá.

María Irene, Alejandra Berenice... son nombres que se recuerdan al hablar de asesinatos en la capital.

En general, la violencia en Durango, tiene la marca del consumo del cristal.

Los casos de hijos que golpean a sus padres en esta condición han incrementado en el último año.

El 10 de marzo de 2017, en el fraccionamiento FSTSE, Jesús David Quiñones Maldonado de 19 años de edad, drogado con varias sustancias atacó a su mamá con un cuchillo de cocina, se lo encajó varias veces. El muchacho está mal, dicen que en el Cereso se la pasa 'empastillado' y no es nada violento; ahí estará 20 años.

En el Centenario, poblado de la zona sierra de la capital sucedió el homicidio mas impactante de los últimos dos años, y justamente relacionado con el consumo de cristal y mariguana en el homicida: un niño de 12 años. Mató a su primita de ocho años, en venganza por regaños y cinturonazos que el padre de la menor, su tío, le había propinado en marzo.

El cuerpo de la pequeña fue encontrado en una casa abandonada con el rostro desfigurado y degollada. Debido a que el niño asesino es adicto a las drogas las autoridades lo pusieron en resguardo para con base en estudios determinar si será ingresado al psiquiátrico.