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Viviendas nacidas de la emergencia

Experiencias de la reconstrucción

Viviendas nacidas de la emergencia

Viviendas nacidas de la emergencia

Iván Hernández

Varias asociaciones, sin acaparar tantos reflectores, hicieron una labor humanitaria destacada y pusieron de nuevo un techo sobre las cabezas de los damnificados.

Los sismos de septiembre pasado dejaron varias lecciones de solidaridad e hicieron visibles a varios colectivos que salieron a ayudar.

En el plano arquitectónico, luego de los terremotos surgieron movimientos como Reconstruir México en el que arquitectos, ingenieros, proyectistas, estudiantes y demás se unieron para plantear la necesidad de hacer las cosas bien, salvando lo que se podía salvar -en especial aquello con un valor histórico- y trabajando en sus respectivas áreas sin otra compensación que auxiliar a quienes perdieron sus patrimonios.

Este proyecto cobró visibilidad debido a los nombres que están detrás: Tatiana Bilbao, Mauricho Rocha, Gabriela Carrillo, entre otros.

Luego se unió a Brigada, red impulsada por el cineasta mexicano Alfonso Cuarón y cuya carta de presentación dice: “Nos unimos para reconstruir México y para construir confianza. Acordamos trabajar de manera transparente. Somos 153 organizaciones invirtiendo 507.3 millones de pesos en 166 proyectos de reconstrucción”.

Una de las acciones se desarrolló en San Mateo del Mar, Oaxaca, con mayoría de población indígena, altos niveles de pobreza y muy vulnerable frente a eventos calamitosos. Allí se construyeron 40 casas diseñadas de acuerdo con las necesidades particulares de sus habitantes.

No obstante, en Brigada son conscientes de que miles de pueblos de la costa oaxaqueña resultaron gravemente dañados por el seísmo.

Varias asociaciones, sin acaparar tantos reflectores, hicieron una labor humanitaria destacada, en especial a la hora de poner manos a la obra y poner de nuevo un techo sobre las cabezas de los damnificados.

ARRIBA MÉXICO

Una de las iniciativas más llamativas. En su portal ofrece servicios de alojamiento “simbólico”, es decir, el cibernauta puede “rentar” edificios, casas y habitaciones devastadas por temblores. Esas donaciones se van a la reposición de sitios siniestrados.

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A seis meses de los temblores, el cineasta Alfonso Cuarón presentó la plataforma Brigada.mx. Foto: AP/Rebecca Blackwell

El plan adoptado en esta organización constó de dos fases. La primera consistía en otorgar refugios dignos a la gente que se quedó en la calle. Cada espacio fue pensado para albergar a cinco personas; los instalaron con carpas, camas, lámparas, una despensa, un kit de cocina, estufa y filtro de agua.

La segunda fase ya era la reconstrucción de viviendas en las zonas más afectadas por los terremotos.

Los sismos, nos recuerdan en este colectivo, dejaron miles de hogares destrozados. Además de los edificios caídos, miles más quedaron inhabitables.

Arriba México se originó a raíz de que sus miembros observaron a la gente salir a las calles tratando de aportar de alguna manera. Se enfocaron en volver a construir lo devastado pensando en que las personas que lo perdieron todo no empiecen desde cero.

RENTA SIMBÓLICA

Una forma de aportar es entrar al portal, ir al catálogo de inmuebles en renta y seleccionar alguna de las opciones.

Los visitantes pueden rentar una habitación en la colonia Narvarte de la capital mexicana en 50 pesos o tres dólares por noche. La descripción del lugar dice: “cuarto con estudio ideal para estudiantes de intercambio”. Tiene medio baño y se destacan la ubicación céntrica, las rutas de transporte que pasan por ahí, los restaurantes en las cercanías.

Las imágenes que acompañan al anuncio nos muestran los muros destruidos, los muebles dañados, lo inhabitable del espacio o bien a gente apostada frente a un inmueble que da la impresión de ser una pila de materiales de desecho.

Más opciones de alojamiento se ubican en la colonia Roma (250 pesos por noche), Juchitán, Oaxaca (490 por noche), y Atlixco, Puebla (790 por noche).

Los alquileres más caros empiezan con un cuarto para compartir en Jojutla, Morelos. La renta es de 1 mil pesos por noche. A sólo una hora y media de la capital mexicana, es una habitación perfecta para compartir con un amigo o con la pareja. El visitante estará cerca de balnearios y lugares recreativos.

En la serie de fotos adjunta se nos muestra una vivienda completamente venida abajo. Por alguna razón el único elemento que se mantiene en su lugar, con la verticalidad adecuada, es la puerta del frente. En los otros encuadres se exhibe como las dinámicas caseras y comunitarias fueron sustituidas por montones de materiales y espacios públicos que lucen la devastación sufrida.

1 mil 500 pesos por noche cuesta un cuarto en una casa tradicional de Cintalapa, localidad a una hora de Tuxtla Gutiérrez, en territorio chiapaneco. Su ubicación, muy cerca de las calles más coloniales y típicas de la región, es excelente.

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Foto: Arriba México

Dos visitantes simbólicos otorgaron cinco estrellas al lugar y pusieron sendos comentarios al respecto: “Me encantó completamente, regresaré y lo recomendaré con todos” y “fue una hermosa experiencia el visitar este pueblo mágico, definitivamente lo recomiendo”.

La última opción invita a desprenderse de 2 mil 500 pesos para hospedarse una noche en un penthouse en la capital del país, en la colonia Condesa. La zona es amigable con las mascotas, hay varios parques. Alrededor hay galerías de arte, restaurantes y bares.

En este caso, los comentarios de dos cibernatuas fueron: “Increíble idea” y “Qué manera tan divertida de invitar a donar”.

Cabe mencionar que cada locación viene acompañada por la correspondiente check list, donde se advierte que el lugar carece de elevador, Internet inalámbrico, aire acondicionado, televisión y demás.

Al final de la información de cada inmueble se recuerda al visitante que, sin importar el lugar que elija reservar, el 100 por ciento de lo recaudado será depositado en el mismo fondo para la reconstrucción de viviendas en la capital del país y en las entidades morelense, oaxaqueña, chiapaneca y poblana.

En el apartado de “ayuda otorgada” Arriba México expone que ha instalado 2 mil 751 refugios para 13 mil 314 personas. Se destacan los casos de Morelos, con 1 mil 403 espacios y 5 mil 886 beneficiarios, y Oaxaca, con 950 alojamientos para 5 mil 060 individuos.

CADENA

La organización Cadena fue elegida para administrar el 100 por ciento de los fondos e implementar el plan de reconstrucción. Cadena significa Comité de Ayuda a Desastres y Emergencias Nacionales, es una asociación sin fines de lucro dedicada a asistir en la emergencia. Llevan más de 200 misiones nacionales e internacionales a lo largo de 13 años. Uno de sus compromisos distintivos es que transportan la ayuda sin recurrir a intermediarios.

Lo indispensable, señalan, es reaccionar y responder de forma inmediata, generar conciencia y acción en la población, integrar grupos y promover la solidaridad sin hacer distinciones por lugar de origen, nivel, género, religión o creencias.

Disminuir la vulnerabilidad de la población que vive en constante riesgo de desastres naturales, fomentar una cultura de prevención e inclusión así como incidir en mejorar las condiciones de vida de personas que afrontan las consecuencias de terremotos, erupciones volcánicas, maremotos y demás, son sus metas permanentes.

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Foto: CADENA A.C.

Cadena surgió tras un desastre, el causado por el huracán Stan en Chiapas en 2005. En ese entonces era solamente un grupo de jóvenes mexicanos de la comunidad judía que acudieron a la entidad sureña a entregar a las víctimas el acopio hecho para asegurarse de que las donaciones llegaran a sus destinatarios. La experiencia los marcó y, como en los siguientes tres años se siguieron registrando eventos calamitosos en territorio mexicano, repitieron su acción solidaria. La asociación quedó oficialmente constituida en en 2008.

Desde Stan y hasta los sismos del año pasado han trabajado a favor de 152 mil 454 familias entregando 659 mil 307 artículos de primera necesidad, 57 mil 418 útiles escolares, 1 mil 593 toneladas de comida y 6 mil 874 filtros de agua, además, han facilitado 12 mil 498 consultas médicas y 3 mil 004 consultas dentales. La organización ha llevado a cabo 228 misiones en las que han participado 3 mil 862 voluntarios.

Un programa llamativo de Cadena se llama De Litro a Techo y consiste en fabricar esa parte superior de las estructuras caseras con Tetra Pak reciclado. Sus destinatarias son familias que han perdido esa protección por causa de algún desastre o que son vulnerables a lluvias.

La dinámica es como sigue: Cadena instala centros de acopio en colegios, universidades, restaurantes, donde las personas deben depositar la mayor cantidad posible de envases limpios y secos.

El Tetra Pack, compuesto con un 70 por ciento de cartón y un 30 por ciento de aluminio y plástico, se colecta y se manda a procesar.

Al tratar químicamente estos dos últimos y separar el primero se obtienen unas láminas térmicas impermeables y resistentes.

IAP

En Mejorando un Hogar reciben donativos, reclutan voluntarios y construyen viviendas a familias rurales de escasos recursos. Una de las razones de éxito de sus proyectos es que involucra a la comunidad beneficiada con la idea de fomentar, a través de la participación activa, el desarrollo personal y social.

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Foto: IAP

Es una IAP, institución de asistencia privada, y emite recibos deducibles de impuestos. La transparencia en el manejo de los recursos es uno de sus compromisos insignia: proporciona a los donantes reportes completos del modo en que se gasta “hasta el último centavo”, remite pruebas de que las casas fueron construidas y hasta los correos de los benefactores llegan palabras de las víctimas del temblor que recibieron la ayuda. Para ser voluntario no se requiere experiencia previa, sólo ganas de ayudar. “No hay como ensuciarse un poco las manos por una buena causa”, se lee en su portal.

Mejorando un Hogar construye casas de 36 metros cuadrados que sólo cuestan 75 mil pesos. En esa cantidad ya están incluidos los materiales, los fletes y la asesoría de técnicos y profesionales dentro del proceso constructivo.

Han puesto en pie domicilios en San Miguel Tecomatlán, localidad del municipio de Tenancingo, en el Estado de México. Esa comunidad fue severamente afectada por el sismo del 19 de septiembre. Entre los daños materiales uno de los más sufridos tiene que ver directamente con los ingresos de los pobladores: de los 315 hornos instalados en el pueblo para hacer pan, una tercera parte sufrió daños.

Los representantes de la IAP hicieron recorridos de vigilancia junto a comisionados de San Miguel y a raíz de esa charla se determinó que la primera acción sería alzar una casa para Juanita Pérez, “un adulto mayor que no cuenta con ningún tipo de soporte familiar”.

En ocho años de labor este colectivo ha construido y donado 46 viviendas, sus acciones, en siete estados del país, han beneficiado a 150 familias y de ellas han tomado parte 450 voluntarios.

PET

Lo de Viviendas Emergentes, Viem, son los proyectos sustentables, vinculados al progreso de las comunidades vulnerables.

Su catálogo de técnicas para edificar ofrece soluciones a los diferentes retos a los que se enfrenta, cuestiones como las condiciones climáticas, la hidrografía y los ecosistemas del entorno.

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Foto: viemmx.org

Uno de sus aportes más llamativos es el sistema de PET (plástico muy usado en envases de bebidas) aligerado, ideal cuando la topografía y mecánica de suelos exige una construcción liviana. Los de Viem colocan una malla de acero tridimensional rellena con botellas vacías que es recubierta en ambas caras, así forman los muros de carga. El panel permite hacer casas únicamente con aplanado. Este sistema fue creado y patentado por los ingenieros Ismael Alfonso Tecuanhuehue Juárez y Luis Felipe Ponce Ramos.

Al trabajar con PET, explica David García, cofundador del proyecto, todas las viviendas son impermeables, aislantes y antisísmicas.

Los hogares Viem miden 64 metros cuadrados, duran al menos dos años sin mantenimiento y hasta 30 con los debidos cuidados, cada una es construida con alrededor de 15 mil botellas.

Los afanes solidarios de estos activistas emergentes se enfocaron en zonas con grandes afectaciones y escasa disposición de recursos: Jojutla, en Morelos, y San Gregorio, en Xochimilco, delegación de la Ciudad de México.

En esta organización conciben su trabajo como una experiencia integral donde se realizan actividades sociales y eco-constructivas.

Twitter: @ivanhazbiz

Escrito en: pesos, lugar, casas, familias

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