Mucho por hacer y el tiempo es poco
Mes y medio después de la jornada electoral, y aún no se reponen los partidos políticos de la aplanadora que les pasó por encima, menos asimilan que o quienes fueron los responsables de la derrota, entre las causas están: la soberbia, las traiciones, malas decisiones, negociaciones equivocadas, dirigencias mal estructurada, falta de compromiso y demás.
Aprender del pasado y ver hacia delante, en el mar de oportunidades que se presentan para un país como el nuestro, obviamente con los ajustes exactos y necesarios para afrontar los retos por venir; la sociedad espera que México ocupe el lugar que le corresponde en este mundo globalizado.
Cuando se esperaban sobresaltos en el Instituto Nacional Electoral (INE) y en el propio Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), todo sucedió de forma pacífica y tranquila; sin embargo, esto no significa que no se piense en una reforma político-electoral, y de lo vivido en el pasado Proceso Electoral, resulta necesario que se discutan algunos temas importantes en la materia, como lo es que el propio INE lleve en sus manos los procesos electorales del país, sean locales o federales, sin necesidad de que coexistan los Órganos Electorales Estatales, con las grandes desventajas de gastar doble, y en base a la profesionalización del personal de carrera garantizar la confianza en las elecciones estatales.
La segunda vuelta electoral-presidencial, que aun y cuando en esta ocasión no fue necesaria, no significa que en próximos procesos electorales no sea requerida y de esta manera quien llegue al poder, posea la legitimidad suficiente para gobernar, también para los gobernadores podría aplicarse.
En materia de recursos públicos y privados que obtienen los partidos políticos año tras año es, sin duda, parte del tema neurológico en la actualidad y de interés general, dado los millones de pesos que son despilfarrados por los institutos políticos.
Por otra parte, la reelección que tiene una historia de nuestro país, podría ser momento de liberarla, y también podría discutirse la posibilidad de acortar los periodos de seis a cuatro años en el caso del ejecutivo federal y estatal.
La figura de diputados y senadores plurinominales o de lista nacional es otro tema que debe estar replanteándose en la próxima legislatura, obviamente con los mecanismos suficientes que eviten tanto la sobrerrepresentación y/o que las minorías pierdan el espacio que se han ganado a lo largo de los años.
La moneda está en el aire y desde luego existen infinidad de prioridades para la ya próxima legislatura; sin embargo, todo es importante para el país.
. . . puede ser que sí, puede ser que no, lo más seguro, es que quien sabe, pero . . . las novatadas en diversas instituciones son una "tradición" que ha traído en su andar grandes desgracias y mientras no se acaben de tajo y se tomen las medidas correctivas éstas seguirán, así que menos bla bla bla y más acción.
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