Se han presentado dos microrráfagas en una década

El Servicio Meteorológico de la Comisión Nacional del Agua no tiene registro, al menos en la última década, de la presencia de microrráfagas descendentes en la zona urbana de Durango. No, cuando menos, hasta hace tres semanas. Después de eso, en 20 días se han registrado dos en la capital del estado: la primera, el 31 de julio (día del avionazo), y la segunda el pasado viernes. Ambas han dejado fuertes daños.

Víctor Hugo Randeles Reyes, Jefe de Hidrología y Meteorología de la Conagua en Durango, reconoció que lo que sucedió la tarde del viernes fue una tormenta de las llamadas microrráfagas descendentes que son muy puntuales, "son un proceso convectivos es decir, tienen que ver con la alta energía calorífica combinada con la humedad y que yo tenga conocimiento o que recuerde, o dejémoslo así, en la última década no se habían presentado este tipo de fenómenos meteorológicos en la ciudad de Durango", comentó.

Y aclaró que en poco tiempo, un lapso de 20 días, van dos fenómenos similares, el primero se registró la tarde del 31 de julio cuando una microrráfaga le pegó al vuelo AM2431 para luego accidentarse, afortunadamente sin que ninguna persona falleciera.

La microrráfaga de ese día del avionazo registró ráfagas de vientos de hasta 51.2 kilómetros por hora en el observatorio de la Conagua, pero en el Aeropuerto pudo haber sido de una fuerza mayor por ser esa zona donde inició.

Ese mismo fenómeno dejó una precipitación de 23 milímetros de agua medidos en el observatorio de la Conagua.

La segunda microrráfaga fue más pequeña en su longitud y fue la registrada la tarde del viernes 17 de agosto provocando fuertes daños por donde pasó en la ciudad de Durango contabilizándose un total de 50 árboles, aproximadamente, derribados con automóviles y casas afectadas; cortes de energía eléctrica y más daños.

Lamentablemente, comenta el meteorólogo de la Conagua, la fuerza de los vientos de esta segunda microrráfaga no se pudieron medir porque su diámetro fue menor y curiosamente el grueso del mismo no pasó por ninguno de los tres pluviómetros que están instalados en la zona urbana de Durango.

"Este fenómeno pasó solo la orilla de donde están los pluviómetros y nos marcaron una precipitación de 10.3 milímetros, aunque el centro del fenómeno traía más agua", reconoció.

Dejó en claro que las causas por las que ahora se estén presentando este tipo de fenómenos meteorológicos en la zona urbana no se conocen, aunque no descartó que en la zona rural del estado se hayan presentado ya microrráfagas descendentes pero no en donde se tiene una estación climatológica o donde alguien haya grabado el mismo.

Igual dijo que a lo mejor hace 30 ó 40 años ya se presentaban estas microrráfagas pero nadie las podía grabar, hoy la tecnología permite grabarlas y poder ver y medir su magnitud.

-¿Se pueden predecir?

"El radar satelital te marca la formación de una tormenta media hora antes pero no te alcanza a medir la intensidad ni la fuerza de la misma, igual puede ser fuerte como puede ser mínima y muchas veces es mínima su fuerza", respondió.