Casi todos los días, ante la Subsecretaría de Movilidad y Transportes se presenta una persona interesada en convertirse en chofer, que es descartada de dicho empleo por ser consumidor de drogas duras.
A decir del titular de la instancia, Jorge Campos Murillo, cada mes son entre 20 y 25 las personas que -tras someterse al examen antidopaje- dan positivo para el consumo de estupefacientes prohibidos. En consecuencia, son rechazados de inmediato para la licencia de transporte público.
Y es que, dice, sería irresponsable dejar en sus manos la seguridad de los usuarios.
Manifestó que no se puede correr el riesgo de que personas bajo los influjos de alguna sustancia ilícita estén a cargo de la conducción de autobuses o taxis, además de que quienes consumen drogas son más propensos a incurrir en actos delictivos.
Campos Murillo, mencionó que para evitar casos de aspirantes o choferes en activo que resulten "embarazados", tras la aplicación de las pruebas de laboratorio, la Subsecretaría a su cargo, trabaja con laboratorios de confianza y de calidad reconocida.
Esto luego de que se difundiera la noticia de que en el estado de Coahuila, particularmente en el municipio de Monclova, tres choferes dieron positivo al embarazo, luego de que para la aplicación del antidoping, entregaron pruebas de orina de sus parejas y no las propias, para evitar salir positivos a alcohol o drogas.
"Hay laboratorios que nos han fallado y han sido dados de baja, para dar la oportunidad a empresas que cuentan con toda la confianza y calidad en su servicio", expuso.