Persiste falta de médicos en Indé

Los pobladores en el municipio de Indé han asumido que no tienen derecho a enfermarse debido a que la Secretaría de Salud (SSD) no ha cumplido con las peticiones reiteradas de enviar un médico a la cabecera municipal para realizar las consultas.

En marzo de este año, el secretario del Ayuntamiento,Guillermo Arturo Silva Gómez, narró al Siglo de Durango que el médico de la comunidad solía ir apenas tres días a la semana.

No obstante, explicó que en los meses pasados la situción se agravó debido a que la Secretaría retiró al responsable del consultorio de la cabecera municipal y solo quedó personal de enfermería.

Como medida paliativa, el Ayuntamiento había contratado los servicios provisionales de un médico cuya residencia está en Santa María del Oro, para que acudiera a atender pacientes durante los fines de semana.

Sin embargo, durante julio, el médico se ausentó para tomar un curso de especialización y dejó a la población sin atención médica.

A pesar de que el personal del Ayuntamiento ha solicitado a la coordinación regional que envíe un médico al municipio no se ha tenido respuesta por parte de la Secretaría de Salud.

Los pacientes en el municipio deben ir a Santa María, cabecera del municipio de El Oro o a Gómez Palacio a recibir atención médica.

Otro de los problemas que enfrenta el municipio para garantizar el derecho que tienen los pobladores a la salud tiene que ver con la falta de medicamento.

Esto, explicó el secretario no solo se reduce al cuadro básico sino también a los antídotos.

Explicó que en el caso de los antídotos, el Ayuntamiento no ha tenido dósis de ningún tipo desde hace más de un año.

Recientemente, en el municipio se han presentado problemas debido a la mordedura de serpiente, de arañas y de alacranes, en cuyo caso ha sido necesario trasladar a los pacientes hasta la capital para recibir apoyo.

El secretario, enfatizó que en los casos anteriores, los pacientes han sobrevivido, aunque no sin daño en su sistema, gracias a que son adultos, pero se teme que si la mordedura o el piquete afecta a un menor de edad la situación tenga un resultado diferente.

Sobre todo, porque durante esta temporada, los caminos en el municipio no se encuentran en las mejores condiciones y eso provoca que el tiempo de traslado sea mucho mayor.