Generaciones duranguenses presencian desfile
México se escuchó por las calles del Centro Histórico de la capital durante el desfile cívico militar alusivo al 208 aniversario de la Independencia.
El repique de tambores, la marcha de personas que le prestan su vida a la patria, la risa de los niños cargados sobre los hombros de sus papás, y claro, el sol que cala como para recordar que el mexicano aguanta ‘y no se raja’; aunque no todos, porque el Palacio de Zambrano cobijaba a unos cuantos.
Más de dos mil elementos del Ejército Mexicano, y diversas corporaciones policíacas y de socorros desfilaron por la calle 5 de febrero, Hidalgo y 20 de Noviembre, para no olvidar la entrada triunfal del Ejército Trigarante el 27 de septiembre de 1821 a la Ciudad de México.
En todo momento sonaron los tambores con decenas de bandas de guerra de escuelas como el Cbtis 89, y casi nadie se quejó del sol porque para las familias lo más importante es “que a los niños no se les olvide que son mexicanos”, dice José Ángel Rendón Aguilar quien llevó a sus tres hijos al desfile.
“Para que sientan amor a su patria”, comentó antes de la selfie familiar en la cantera del Congreso del Estado.
Acudir al desfile es una tradición duranguense, de adultos que eran llevados por sus padres y ahora acuden con sus hijos y nietos, como Elizabeth García Cabral, que tiene memoria de esto desde los 10 años, y ahora se encarga, cada año, de reunir a sus hijos y nietos para ver el recorrido. Dice Elizabeth que a lo largo del tiempo ha visto como el Ejército Mexicano ha integrado mas elementos y equipo a su fuerza, eso es lo mas impresionante.
Tras una hora de recorrido de vehículos, binomios caninos, equipos especiales para localización de personas y explosivos, más de 100 caballos, vehículos todo terreno, y mas de tres mil personas uniformadas, el desfile concluyó ‘sin novedad’.
Eran las doce del día, y los tambores dejaron de sonar pero no México, el festejo de ser mexicano se trasladó a las cocinas, porque las papilas gustativas evocan también al nacionalismo.