Verdades y Rumores
PALOMITA A LA FISCALÍA
En una época en la que varias dependencias de la administración aispurista requieren consolidar su credibilidad, se le presentó a la Fiscalía del Estado un caso trágico, pero que irónicamente, se vuelve una oportunidad inmejorable para marcar el camino de la dependencia rumbo al futuro.
Ayer, se dio uno de los capítulos más importantes en ese hecho: los abusos en la Escuela Normal Rural J. Guadalupe Aguilera y los delitos que de estos se derivan, por primera vez perseguidos penalmente tras la muerte de Ronaldo Mojica Morales, quien falleció después de una semana de abusos en esa institución.
La Fiscal confirmó ante los medios que, tras las pruebas científicas realizadas por un laboratorio especializado, se determinó que el padecimiento que mató a "Rony", se derivó de las prácticas sufridas en Aguilera: ingesta de alimentos en mal estado, agresiones físicas y sometimiento a deshidratación extrema se conjugaron para acabar con su vida.
Por ello, además de la discriminación, tortura y pandillerismo, ahora las 15 personas que participaron (por acción y omisión) podrán ser también procesados por el delito de homicidio, si bien no será hasta que se integre la carpeta de investigación que se determine si doloso o culposo.
Como pocas veces, la sociedad tiene la atención puesta en un caso de carácter penal, y poco a poco, este va cobrando claridad en lo que a la necesidad (y exigencia) de castigo se requiere.
Cierto es que aún falta un buen trecho para que esto concluya, pero llevar el proceso a buen término, será agradecido socialmente. Y tanto la Fiscalía como el Gobierno Estatal se verán beneficiados de ello. Y aunque la vida de Ronaldo con nada se recupera, la familia de Ronaldo encontrará algo de paz, pues es de recordar que ellos se mantienen en la lucha para que se castigue a los responsables del hecho.
Por cierto: lo que podría resultar complicado, es dar con todos los responsables, pues fuentes fidedignas afirman que algunos de ellos comenzaron a irse del estado, ante el temor cada vez más real de que sean aprehendidos.