El 'Tío' Solano, por siempre en el Zarco
La comunidad futbolística despidió a uno de los mejores jugadores que ha dado Durango.
Uno de los últimos deseos de Luis Eduardo 'Tío' Solano, leyenda del futbol duranguense, es que sus cenizas sean esparcidas en la cancha de futbol del Estadio Francisco Zarco, lugar donde vivió grandes momentos de felicidad practicando su deporte favorito con gran calidad.
Este domingo familiares y amigos despidieron al futbolista, amigo, padre, entrenador e ídolo, ya que su calidad en el terreno de juego le llevó a hacerse de muchos admiradores.
La esposa, por 41 años, del "Tío" Solano, la señora Artemisa Huerta, platicó con El Siglo de Durango sobre la vida de uno de los futbolistas con más calidad que ha tenido esta tierra.
"Fue un espléndido padre, esposo y abuelo, siempre pendiente de toda su familia, impulsándola a salir adelante, inculcándoles el deporte y los valores que ahora muy poca gente los tiene", menciono la Señora Huerta.
Dijo que durante su enfermedad el "Tío" les decía que se sentía triste por estar en esa situación, y aunque le echaba ganas por salir adelante este viernes dejó el plano terrenal para trascender al celestial.
COMO INSTRUCTOR
"Siempre fue muy deportista, con una trayectoria deportiva muy amplia, como entrenador en la Secundaria Uno, en el CBTA 3, en el Campestre y Alacranes de Durango, preparando a muchas generaciones, quienes lo recuerdan y le agradecen el aprendizaje", menciona y agrega que muchos muchachos mandaron mensajes y muestras de cariño para el "Tío" y de apoyo para la familia, así como ofrendas florales de diferentes equipos de la localidad.
Incluso, agrega, que para algunos de sus alumnos fue la figura paterna, toda vez que los motivó a salir adelante y fue inspiración para estos jóvenes que llegaron a ser alguien en la vida.
COMO DEPORTISTA
La Señora Artemisa cuenta que para el "Tío" su vida fue el futbol: "Cuando estuvo en México en el equipo de la UNAM, que lo escogieron para ir a un torneo a Cannes, Francia, él platicaba de muchas anécdotas de esas experiencias que vivió, codeándose con jugadores como Hugo Sánchez y Manuel Negrete, aunque su gran amigo era Luis Flores, con quien más compartía tiempo".
PERSONA
"Siempre lo caracterizaba su buen humor, motivando a la gente, tenía un liderazgo que le permitía influir de manera positiva en las demás personas", cuenta.
DESPEDIDA
Con tranquilidad y resignación la Señora Huerta dice que el mejor legado que le pudo dejar el "Tío" Solano es una gran familia, sus 4 hijos, Artemisa, Luis Arturo, Edson y Gerson, así como sus nietos que también son futbolistas.
Descanse en paz el "Tío" Solano, quien si se lo permiten, descansará eternemante en la cancha de sus amores el Estadio Francisco Zarco.