Los cortes leves suelen dejar de sangrar en unos minutos.
Los cortes leves suelen dejar de sangrar en unos minutos, pero si el corte sigue sangrando abundantemente al cabo de 10 minutos o es lo bastante profundo como para dejar al descubierto la dermis - la capa situada bajo la epidermis- , se debe acudir inmediatamente al médico.
Una vez detenida la hemorragia, se aplica una pomada antibiótica de venta libre y se cubre la herida con un vendaje o apósito limpio. Esto minimiza el riesgo de infección y favorece la cicatrización.
En el caso de corte muy grave
En el caso de que el corte haya sido muy grave y se haya perdido un trozo de piel, una uña o incluso la punta de un dedo, coge lo que se ha perdido. Mete el tejido cortado en una bolsa y, a continuación, coloca la bolsa en otra llena de hielo. Es fundamental asegurarse de que el tejido y el hielo no entren en contacto directo. Esto puede aumentar las posibilidades de éxito de la reimplantación.
Aunque parezca que es contradictorio, se deben mantener los cuchillos bien afilados, ya que requieren menos fuerza para cortar y reducen las posibilidades de resbalar o hacer un mal gesto.
¿Se puede seguir cocinando? Sí, se puede cocinar con un dedo cortado, pero hay que tomar las medidas adecuadas para garantizar tanto la propia salud como la seguridad de los demás si se está preparando comida para ellos. Para ello, es imprescindible seguir estos pasos:
Limpia la herida y tápala: es esencial para seguir con el cocinado.
Utiliza un guante: para que no haya ningún problema, se debe utilizar un guante apto para uso alimentario sobre el dedo o la mano vendados. Este paso es crucial para evitar la posible contaminación de los alimentos con bacterias procedentes de la herida, y también ayuda a mantener el vendaje seguro y seco.
Cambia las vendas con regularidad: si la venda se moja o ensucia al cocinar, hay que cambiarla lo antes posible para mantener la limpieza y evitar una posible infección de la herida.