Mente y Cuerpo: La Íntima Relación
Para la antigüedad la inteligencia estaba íntimamente relacionada con el cuerpo, no había modo de separar o dividir tal realidad, una mera extensión una de la otra, de tal manera que también se consideraba por medio del soma (cuerpo) físico la capacidad de conocimiento que tenía un sujeto; advertir que la idea de inteligir en la época antigua era la facultad ( propia de la especie) para elevar el alma a partir del acto intuitivo inmanente (nóesis) contrapuesto a la razón (diánoia), y así "elevar" la interioridad a una sabiduría máxima donde la naturaleza se hace consciente y da cuenta de su propia consciencia.
Los gimnasios griegos eran prácticamente los lugares donde se dialogaban los temas nodales de la estructura humana, allí se ejercitaba y se intentaba integrar lo que compone a un individuo en un solo movimiento ( mente, cuerpo, espíritu) y aceptar así un orden general enigmático que nos sugiere como parte y que aguarda ser descubierto intuitiva y razonablemente. Es decir que en ese entonces una mente brillante le correspondía a un cuerpo escultural.
Las enfermedades como la epilepsia eran tomadas como un trauma corpóreo causado por un desprendimiento del alma hacia un mundo ideal (Platón-topus uranus), por tanto la mayoría de los padecimientos o impedimentos orgánicos eran vistos como "puentes" entre realidades alternas y la que se percibe de modo sensual (sentidos) en el caso de aquellos que padecían orgánicamente algún impedimento.
"La superstición, la magia y el acto curativo se unía en un solo acto y la figura del médico y la del sacerdote se encontraba a la base de esta fusión, tal como lo evidencia la imagen de un hombre (médico), con una máscara de ciervo encontrado en la cueva de Trois Freres, datada hace más de 16.000 años, y que se considera como la más antigua representación de un humano curando enfermedades". María da Graça de Castro.
Uno de los legados más importantes para el entendimiento humano desde el pensamiento antiguo es justamente la honestidad y armonía que se debe construir entre lo interno y la exterioridad, entre la mente y el cuerpo, entre el Nous y Soma.



