Suspiro encallado
Allá lejos entre esporas de un suspiro ocupante encallado de mi cuerpo el pecho se constriñe deseoso, desdoblando sueños que se le hacen una y otra vez a sí mismos. Alexitimia de mi faz ante tus ojos impasibles, manos que catan cortejos asfixiando el aliento, lenguaje atisbo ebrio de tu boca replica y entona miedo de estremecer, confín del añoro suicido, refugio absoluto que envuelven los instantes en instintos. Besos con sabor a sahumerio en prórrogas eternas revueltas en realidades he de traicionar regulación del corazón hambriento. El amor se queda a expensas de la calma que estrangula, funda en escuelas del latir, vuelve a amanecer, roces involuntarios diseminando tu nombre ya todo es ella, ínfula de Gloria en los labios que deja sellados, enardecer efímero, escena catastrófica, naturaleza frágil en magnitud que inutiliza en tu presencia.
MI VOZ A LA DERIVA
Aún espero que el me devuelva tu voz, que tu sombra me entregue tu cuerpo, que el aire me haga respirarte, que esta muerte demorada me dé tu vida, que la lluvia enfríe mi cuerpo para sentir tu calor es de nuevo, que en la noche te traiga para amarte, que mis palabras te enciendan los ojos, que mis pensamientos te busquen donde estuviste y ya no estás, que el tiempo se mude de universo para quedarnos los dos como antes, hoy que haya una esperanza, eso es lo que quiero. En definitiva decir que el color Claro de tus ojos penetra mi cuerpo mientras mis manos apretadas y frías sienten la necesidad de tu fluir suavemente sobre mi vida.
POEMAS SOBRE LA ESPUMA
Poemas entre los dedos al despuntar el alba, expuestos ante el uso de sombras y sábanas revueltas, sueños disidentes que se atreven a migrar en un gemir, suave el recuerdo de tu gesto que no me deja gritar.
Caprichos del hombre delineado, crecimiento en el pecho, goce y tortura eternos deja que te mire por dentro.
Roce suave de tu silencio sobre los labios nocturnos el entendimiento se enaltece, yo te escribo, voz de las entrañas, sonrisa trunca, angustia en tempestad quiero escapar a lo esencial, torbellinos de espera, nadie pudo callarle. Ámalo lejos invisible para quien no sabe mirar. Dime tú, mujer de mis ausencias que infiernos despertarás en el ocaso que vida te dieron, larga es la espera, remolinos de letras.
TUS BESOS SABOR A SAL
Ahogándome en textos yerro de lo acaecido, sólo guardo el sabor de tu boca que calla sed de arterias, y necias, ceden detrás de tu risa, néctar de tu carne, juguete incansable del letargo y los silencios, reflejo aséptico del cielo, ven y devora mi espíritu.
Vendrá mi amor y me dará su tacto luminoso y suave, torpe la ternura se esculpe silente en la tristeza, recoge eco de la sangre y la palabra en confeso cielo, ojos lacrados miran la paciencia en mil gritos, ambiciosos fornican en secreto, no lo reveles a nadie, sigo con el deseo de amarte.
Decido en mi sueño cómo rezar a ciegas, no tengo descanso, intuyo, hoy puede ser un deseo. Mujer que laceró mis oraciones aletarga el y estalla, relámpago ensordecedor de corazones.
No está tu voz para decirme esta noche: llovió por dentro.
Seguirás amaneciendo en la conciencia, encuentro que de ojos brota en esta soledad sin ti me encuentro.
EL FARO DE TUS OJOS
Ojos buscando inquietos quién percibe distante de mis reflejos sobre recuerdos, hoy piel en todos los silencios, rostro sin pluma abriendo poros, anudando líneas, dedos entumidos serviles a la tinta espacios presuntuosos que recorren imantan la voz, permiso a la injerencia más segura que la razón, te voy hablando despacio palabras en el perímetro del corazón.
Huellas al aire suben en la saliva al amanecer, belfos impalpables, humo de la nostalgia, pequeñas consonantes índex cifradas e intensas palabras en todo trayecto hacia ti, golpean en lo profundo. Individualidad rota en tránsito a punto cardinal sobre el cuerpo hecho cuenco en tus manos, hoy deseo de la ilusión que no artículo en la punta de la lengua, boca con sabor a fantasía que extraviada prolonga tu estadía con ansias de otro cielo.
La mitad de mi pecho desconoce el lenguaje de mi voz y me retrae, labios implacables que pronuncian un mismo gesto cuando tus nubes sobre mi piel hablan de un deseo prohibido sobre sábanas raídas casi transparentes.
ILUSIONES AHOGADAS
Llenos de las mejores ilusiones tienden el vacío, regresa a mí, albacea de mi último suspiro, ausencia apostada de vinagre y hiel en todo lo que toca.
Devoto en vigilia arrastró el silencio puro y exacto, voluntad de labios sometiendo labios a tu voluntad.
No consigo sanar distancia, pliegues de tu sombra, rumor que anhelo impaciente, las aguardo, alucino nudos ciegos.
Apetecida boca enlazada a tu nombre, carencia que no entiendo, sigues en mí, lengua con acierto de víspera dejándose llevar por el lascivo inquieto, ilusión que con amor bendigo dulce y cruel castigo, recuerdos de todo lo vivido.
Bendito sea el sueño eterno en que me entrego, cicatriz de memoria que inunda y dobla la frente, cálido soplo desnudo y desgajante, cautiva en la mirada, queda la piel enamorada.
Mudo el acento te habla, nardo que le dio envidia la blancura, espejismo tenaz que alucina pasa la angustia.