Alerta en poblados de Durango por derrame de dos presas
En un solo día, la presa Peña del Águila, ubicada en el municipio de Durango, captó más de nueve millones de metros cúbicos de agua, con lo que alcanzó su capacidad máxima y comenzó a derramar hacia el río La Sauceda. La presa Santa Elena, en el municipio de Súchil, también llegó a su límite de almacenamiento.
La mañana del miércoles, la Peña del Águila registraba un almacenamiento del 75.1 por ciento, equivalente a 20.9 millones de metros cúbicos de agua de un total de 27.9 millones que conforman su capacidad.
Sin embargo, 12 horas después, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) alertó a los poblados ribereños del río La Sauceda de que el embalse comenzaba a derramar agua.
Hacia las 22:00 horas, la Coordinación Estatal de Protección Civil envió personal a los poblados Juan B. Ceballos y San José del Molino, los más cercanos al río y a la presa, para monitorear la situación en caso de un posible desbordamiento.
Aunque a las seis de la mañana de este jueves 28 de agosto se informó que la presa dejaba de verter agua y se mantenía al límite de su capacidad, poco más de una hora después volvió a recibir aportaciones y comenzó a verter 24 metros cúbicos por segundo.
Protección Civil Estatal mantiene vigilancia en las comunidades cercanas: Juan B. Ceballos, San José del Molino, Calera, Labor de Guadalupe, Santa Cruz del Río, 5 de Mayo y 5 de Febrero, que en conjunto suman alrededor de seis mil habitantes. Las dos últimas son las más pobladas.
RIESGO, PRESA DEL HIELO
Aunque, por el momento, las lluvias registradas en la capital no han representado una amenaza para los asentamientos que se encuentran sobre la Presa del Hielo desde hace años, las autoridades aseguran que esta área sigue siendo una zona de riesgo.
El alcalde Bonifacio Herrera Rivera indicó que el peligro radica en que al margen de la desembocadura de la presa se siguen construyendo viviendas.
Afirmó que las familias que viven en esa zona ya han sido notificadas para que se retiren, ya que se encuentran en un área vulnerable. Sin embargo, no atienden el llamado.
El funcionario advirtió que "la naturaleza va a tomar su cauce", por lo que siempre existe un riesgo latente para las viviendas cercanas.