Año Nuevo 2026: Tradiciones de Año Nuevo en México que pocos conocen
Cuando se habla de Año Nuevo en México, la mayoría piensa en uvas, ropa interior de colores y maletas dando la vuelta a la manzana. Sin embargo, en distintas regiones del país sobreviven rituales y costumbres poco conocidas, muchas de ellas con raíces prehispánicas, coloniales o comunitarias, que buscan atraer abundancia, protección y buena fortuna para el año que inicia.
Ritos para “limpiar” el año que termina
En varios estados del sur y centro del país, especialmente en comunidades indígenas, el cierre del año se acompaña de limpias con hierbas, copal o huevo, con la creencia de eliminar energías negativas acumuladas durante los últimos meses.De acuerdo con registros del Instituto Nacional de Antropología e Historia, estas prácticas mezclan cosmovisiones prehispánicas con elementos religiosos introducidos tras la Conquista.
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Barrer la casa… pero hacia afuera
Aunque muchos lo hacen sin saber su origen, barrer la casa antes de la medianoche del 31 de diciembre es una tradición que simboliza expulsar la mala suerte. En algunas regiones se insiste en que el polvo debe sacarse hacia la calle y nunca dejarse dentro, para no “encerrar” los problemas del año viejo.
Fuego para cerrar ciclos
En estados como Veracruz, Oaxaca y zonas del centro del país persiste la quema de muñecos, ropa vieja o papeles con deseos escritos, una costumbre heredada de rituales de renovación. El fuego representa el cierre de ciclos y la oportunidad de iniciar el año con una energía distinta.
Dinero, semillas y abundancia
Además de colocar billetes en los zapatos o en la cartera, en comunidades rurales se acostumbra guardar granos de maíz, lentejas o frijol durante la cena de Año Nuevo. Estos alimentos simbolizan fertilidad, trabajo y alimento asegurado para los próximos meses.
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Comidas que también son ritual
En algunas zonas del Bajío y el sureste, se cree que no se debe dejar la mesa vacía la noche del 31 de diciembre. Pan, tamales o frutas se mantienen hasta el amanecer del 1 de enero como señal de abundancia continua para el hogar.
Agua, baños y renovación
Otra tradición poco difundida es bañarse con agua, flores o esencias durante la madrugada del 1 de enero. El acto simboliza purificación y nuevos comienzos, y suele realizarse en silencio, acompañado de una intención personal para el año que arranca.