Arte urbano y vandalismo

En las calles de Durango, los muros se han convertido en un espacio de expresión constante. Colores, figuras, consignas y personajes aparecen de pronto en bardas, fachadas y espacios públicos, abriendo un debate que se repite con frecuencia; sin embargo, estos comúnmente se llegan a confundir con el vandalismo.

En la ciudad existen ejemplos claros de arte urbano, murales realizados con autorización de los propietarios, incluso con respaldo comunitario, que aportan identidad visual a colonias y zonas específicas. No obstante, no siempre ocurre así, y es que hay ocasiones en las que quienes se asumen como artistas urbanos intervienen espacios privados o públicos sin solicitar permiso, lo que genera molestia entre vecinos y propietarios. Aunque la intención pueda ser artística, la falta de autorización convierte la acción en un conflicto legal y social.

Esta situación ha provocado que, para parte de la ciudadanía, todo lo que aparece pintado en una pared sea percibido como vandalismo. La línea se vuelve aún más difusa cuando se mezcla el arte urbano con el grafiti tradicional, entendido muchas veces como firmas o rayones, sin una propuesta estética clara ni consentimiento previo.

Permiso

Jóvenes emprendedores duranguenses le han dado la oportunidad a artistas emergentes de usar sus paredes para darle un toque original al negocio.

Estampas

Alrededor de Durango, en gran parte en el centro, se pueden ver como también se usan pegatinas en vez de graffiti.

Mensajes

En recintos abandonados, la gente ha pintado mensajes de apoyo e incluso partes de canciones que se encuentren en tendencia.

Mientras no exista una mayor claridad, y diálogo, entre artistas, autoridades y ciudadanía, el debate continuará.

Abandonadas

Múltiples personas, al percatarse del abandono de alguna vivienda, tienden a usar la pintura en aerosol en su fachada.

Firmas

Algunos de los artistas que usan su talento en paredes autorizadas, dejan en una esquina su nombre artístico.

Unos sobre otros

En algunas partes de la ciudad, se puede ver incluso como hay mensajes sin sentido en las paredes, siendo este el ejemplo más claro del porqué en veces la sociedad generaliza.