Solidarios. Circula en redes sociales una imagen en la que se observa a varias personas ayudando a alguien que se atascó.
Es sabido que durante la temporada de lluvias las condiciones de los pavimentos en general se deterioran por la humedad, pero hay zonas en las que los daños son aún más notables, como la zona Sierra de la entidad.
Y es que, por la naturaleza de la orografía y el territorio, estos caminos resultan muy afectados por las lluvias, sobre todo cuando son constantes.
Solyenitzin Pinedo, originaria de Mezquital, recorre frecuentemente diversos tramos carreteros para llegar a su comunidad de origen y compartió que durante las últimas semanas las condiciones se han deteriorado bastante ya que las lluvias han provocado la caída de piedras de los cerros y ninguna autoridad acude a retirarlas.
Cada año son los propios habitantes de las comunidades los que retiran las rocas para poder abrir paso en caminos que se quedan incomunicados; y también son muy solidarios por lo que es común que ayuden a quienes se quedan atascados en el lodazal.
No es algo nuevo. De hecho, los habitantes de la Sierra han sido testigos de esta situación por años, a falta de atención por parte de los tres órdenes de gobierno. Inclusive, hay rocas grandes que ellos no pudieron retirar las cuales, según comentan los afectados, están ahí desde el año pasado.
Es también una muestra más de la desigualdad que padecen quienes habitan en la región indígena del estado, a donde por décadas se han destinado múltiples recursos públicos, pero que no han impactado en la tan anhelada justicia social y en mejores condiciones de desarrollo.
Recientemente el presidente de la Asociación de Maquinaria Pesada, Fernando Castro, calculó que alrededor del 50 por ciento de la superficie tiene problemas complicados, sobre todo en caminos vecinales que están deshechos, entre los que mencionó los del municipio de Mezquital, donde hay carreteras que ya requieren una reparación total.






