Este es el trámite que debes hacer si eres mexicano y fuiste deportado de Estados Unidos

Ser deportado de Estados Unidos representa el final de un sueño o vida para miles de mexicanos que deben reintegrarse a la vida en su país de origen. Para facilitar este proceso, es fundamental conocer los trámites necesarios al regresar a México y evitar problemas legales o dificultades para acceder a servicios esenciales.

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Registro ante el Instituto Nacional de Migración

Lo primero que debes hacer al pisar suelo mexicano es registrarte ante el Instituto Nacional de Migración (INM), la autoridad encargada de supervisar la entrada y salida de personas en el país. Si fuiste deportado en un vuelo de repatriación, el INM te recibirá en el aeropuerto y gestionará tu ingreso. En caso de que regreses por cuenta propia, deberás presentarte en un punto de control migratorio para acreditar tu identidad.

El documento de repatriación, que te entrega el gobierno estadounidense al ser deportado, es clave en este proceso. Con este documento, el INM podrá reconocerte como ciudadano mexicano y facilitar los trámites para recuperar tu documentación oficial.

Requisitos para acreditar tu identidad

Para realizar cualquier trámite en México después de tu deportación, necesitas documentos que demuestren tu identidad. Entre los más importantes están:

• Pasaporte mexicano (si lo tienes).
• INE o cédula profesional (en caso de contar con ellas).
• Acta de nacimiento para obtener nuevas identificaciones.
• Hoja de repatriación, la cual será clave para tramitar nuevamente tu INE y otros documentos oficiales.

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Si perdiste todos tus documentos en el proceso de deportación, la hoja de repatriación será la base para gestionar cualquier trámite ante las autoridades mexicanas.

Acceso a servicios y reinserción en la sociedad

Una vez que tengas tu identificación oficial en orden, es recomendable abrir una cuenta bancaria en México. Algunas instituciones ofrecen facilidades para deportados o repatriados, permitiendo la apertura de cuentas con documentos básicos como acta de nacimiento, CURP o la hoja de repatriación. Esto te ayudará a recibir depósitos, realizar pagos y acceder a servicios financieros.