Investigan en Durango las plagas que amenazan la producción algodonera
La producción de algodón en el norte de México enfrenta una de sus peores amenazas en años, ante el resurgimiento de diversas plagas, como la proliferación de la chinche "Libus", que ha cobrado notoriedad en regiones de Durango, Chihuahua, Sonora y en la franja fronteriza de Texas, Arizona y Nuevo México.
La presencia de chinches secundarias, entre otras plagas, está devastando cultivos de algodón en zonas clave como la Comarca Lagunera. Investigadores y autoridades del sector agropecuario advierten que, de no contenerse a tiempo, el daño a la economía regional podría ser considerable.
En Durango se está desarrollando un proyecto de investigación con el objetivo de atender esta problemática, derivada en parte de la falta de información actualizada sobre estas plagas.
La investigación está a cargo del ingeniero Steven Ávila Jara, estudiante del Doctorado en Ciencias Agropecuarias y Forestales de la Facultad de Agricultura y Zootecnia (FAZ) de la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED), campus Gómez Palacio.

El objetivo principal del estudio es identificar la dinámica poblacional de las chinches, su desarrollo dentro del ecosistema algodonero y los daños específicos que provocan, ya que muchos productores suelen atribuir estos daños a otras plagas.
La metodología del proyecto contempla muestreos durante la etapa de botones florales para detectar la presencia de chinches. En la fase de floración, se utilizarán insecticidas no tóxicos para evitar afectar a los enemigos naturales de las plagas, permitiendo así un control biológico eficaz y amigable con el medio ambiente.
La expansión de estas plagas se atribuye al aumento de las temperaturas y a los periodos secos cada vez más prolongados. Este proyecto busca ser un punto de partida hacia soluciones sostenibles que ayuden a mitigar el impacto económico en la producción algodonera del norte del país.