Figura. OG Anunoby no solo lideró en puntos, también cerró la final con triples decisivos en el último cuarto que ampliaron la ventaja y marcaron el quiebre definitivo.
Nueva York volvió a saborear la gloria. En Las Vegas, los Knicks se proclamaron campeones de la NBA Cup 2025 tras imponerse 124-113 a los Spurs de San Antonio, un triunfo que puso fin a 52 años sin levantar un título oficial. La figura fue Jalen Brunson, elegido Jugador Más Valioso con 25 puntos, 8 asistencias y 4 rebotes, acompañado por la contundencia de OG Anunoby, clave en el cierre.
UN INICIO CARGADO DE ACCIÓN
El arranque fue favorable a San Antonio, que se adelantó con la energía de Victor Wembanyama y un parcial de 30-28. La respuesta neoyorquina llegó en el segundo cuarto, con un ataque más ordenado que equilibró el marcador y dejó la primera mitad 61-59. El duelo se mantuvo parejo, con intercambios de ritmo y defensas exigidas.
En el tercer periodo, los Spurs encontraron aire con su rotación y se fueron arriba 94-89, apoyados en la producción de Dylan Harper, quien terminó con 21 puntos y 7 rebotes. Pero el último cuarto cambió la historia: Jordan Clarkson encendió la chispa con dos triples consecutivos y los Knicks tomaron la delantera 97-94. Desde ahí, la ofensiva de Nueva York no volvió a mirar atrás.
PROHIBIDO PARPADEAR
Las decisiones arbitrales y la tensión en la banca texana marcaron el tramo final. Una técnica contra Mitch Johnson y un triple invalidado a Julian Champagnie dieron oxígeno a los Knicks, que aprovecharon cada posesión. Con menos de dos minutos, Anunoby clavó otro triple que abrió la brecha definitiva (118-110) y apagó cualquier intento de remontada.
San Antonio buscó detener el reloj con faltas, pero la efectividad de Nueva York desde la línea selló el campeonato. Medio siglo después de su último título de liga en 1973, los Knicks levantan un nuevo trofeo y escriben un capítulo histórico en la NBA Cup.