¿Los huevos se deben guardar en el refrigerador? Esto dicen expertos sobre su almacenamiento
En los supermercados, los huevos suelen estar a temperatura ambiente, mientras que en casa muchas personas los guardan en el refrigerador. Esto ha generado dudas sobre cuál es la forma correcta de conservarlos y por qué existe esta diferencia.
La mayoría de las tiendas mantiene los huevos en estanterías, sin necesidad de frío. Sin embargo, al llegar al hogar, la recomendación cambia. La pregunta es: ¿por qué en un lugar sí y en otro no?
Protección natural del huevo
La respuesta está en la cutícula, una capa protectora que cubre la cáscara y funciona como una barrera natural contra bacterias. Esta capa es muy sensible a los cambios de temperatura.
En entornos controlados, como los supermercados, los huevos se mantienen estables, pero en las cocinas domésticas las temperaturas varían constantemente por actividades culinarias, apertura de ventanas o cambios entre día y noche.
¿Refrigerarlos en casa?
Guardar los huevos en el refrigerador evita que se forme condensación sobre la cáscara, lo que podría comprometer la cutícula y permitir la entrada de bacterias como la salmonella. Además, el frío conserva mejor el valor nutricional del huevo y sus propiedades para cocinar, como la capacidad de formar espumas o emulsiones.
¿Dónde colocarlos en el refrigerador?
Aunque muchos refrigeradores tienen compartimientos para huevos en la puerta, este es el peor lugar para guardarlos, ya que ahí sufren más cambios de temperatura cada vez que se abre.
La mejor opción es colocarlos en las bandejas interiores, dentro de su envase original, para mantenerlos protegidos y a temperatura constante.
Consejos para conservarlos
- No lavarlos antes de guardarlos, solo justo antes de usarlos.
- Evitar los compartimentos de la puerta del refrigerador, donde la temperatura cambia con frecuencia.
- Refrigerarlos inmediatamente después de la compra y mantenerlos siempre fríos hasta el momento de su uso.
El almacenamiento adecuado no solo protege la salud, sino que también asegura que los huevos mantengan su calidad y sus propiedades culinarias hasta el momento de la preparación.