NBA: ¿Quiénes son Chauncey Billups y Terry Rozier, los basquetbolistas detenidos por el FBI?
El escándalo por apuestas ilegales ha sacudido a la NBA y a sus seguidores, luego de que el FBI arrestara a dos figuras de renombre, Chauncey Billups, actual entrenador de los Portland Trail Blazers, y Terry Rozier, base de los Miami Heat.
Ambos son señalados por su presunta relación con una red de juego ilegal que involucra manipulación de información y vínculos con grupos del crimen organizado. El caso ha encendido las alarmas sobre la integridad del deporte y las posibles consecuencias para la liga.
Figura legendaria en apuros
Chauncey Billups, exjugador de élite y entrenador en la Portland Trail Blazers, fue arrestado por el FBI bajo cargos relacionados con una red de apuestas ilegales que incluía juegos de póker manipulados y supuestos nexos con familias mafiosas de Nueva York.
Durante su carrera como jugador se ganó el apodo de “Mr. Big-Shot” tras ganar el título de la NBA en 2004 con los Detroit Pistons y ser nombrado MVP de las Finales. Ahora, su detención marca un escándalo inédito para alguien de su trayectoria, incluso después de haber sido incorporado al Salón de la Fama del Baloncesto en 2024.
“Scary Terry” bajo la lupa federal
Por su parte, Terry Rozier, base del Miami Heat y veterano con más de una década en la liga, también fue arrestado en el marco de la misma operación. Se le acusa de filtrar información privilegiada sobre su rendimiento en un partido de 2023, lo que habría permitido apuestas millonarias “a la baja” sobre sus estadísticas.
Rozier ya había sido investigado por irregularidades en el pasado, pero esta vez enfrenta cargos formales que podrían poner fin a su carrera profesional.
Una operación que sacude a la NBA
Más de 30 personas fueron detenidas en esta operación coordinada por el FBI, evidenciando cómo el mundo del deporte profesional puede verse comprometido por esquemas de apuestas ilegales y corrupción.
Tanto la NBA como los equipos involucrados se han limitado a declarar que cooperarán con las autoridades. Mientras tanto, Billups y Rozier quedan bajo investigación, y el futuro de ambos dentro del baloncesto parece más incierto que nunca.