Jugada. La rusa Diana Shnaider devuelve una bola ante la belga Elise Mertens este jueves, durante un partido de cuartos de final del Abierto de Tenis de Monterrey.
El calor de la capital de Nuevo León no se compara con el fuego que vive dentro de Diana Shnaider, dueña de un espíritu guerrero que permitió remontar dos "tie breaks" de por medio, a Elise Mertens (3-6, 7-6 y 7-6) para clasificar a las semifinales del Abierto GNP Seguros de Monterrey.
Después de tres horas y tres puntos para partido, la número 12 del ranking mundial se metió entre las mejores del torneo que busca conquistar por primera vez.
Su camino a la grandeza busca escribir un nuevo capítulo en la Sultana del Norte. Nacida en Zhiguliovsk, Rusia, a mil kilómetros de Moscú, Shnaider comenzó a jugar tenis con cuatro años. Sin embargo, fue en la NCAA donde finalmente encontró la clave para su progresión tenística, gracias a una beca deportiva en Estados Unidos. Fue parte de la Universidad de Carolina del Norte y allí empezó a dar sus primeros pasos hacia su mejor versión.
Gracias a esa experiencia, "aprendí a gestionar la presión y eso me sirve ahora al enfrentarme a las mejores del mundo, ha sido esencial tomarme ese tiempo para mejorar en todos los aspectos", comentó Shnaider. Además, tuvo como entrenadora a la exnúmero uno del mundo, Dinara Safina.
Su carrera la engalanan dos títulos en dobles y cuatro en singles, todos obtenidos en 2024, año en el que destaca, además, su medalla olímpica en París.
Diana Shnaider llegó a la ronda de las cuatro mejores del Abierto de Monterrey después de vencer a Kamila Rajimova y en octavos de final a Mertens, cinco veces ganadora de Grand Slams en la categoría de dobles.
La potencia y la mentalidad son las características que convierten a Shnaider, de 21 años, en una jugadora única. Por ahora, su talento y su inconfundible bandana seguirán enamorando al público regiomontano en el Club Sonoma.