Caso. La Defensa tuvo que actuar para que el soldado raso regresara a la menor a su mamá.
Una fuerte movilización se registró la noche del martes en el fraccionamiento Los Arbolitos III, luego de que se reportó que un hombre se negaba a entregar a su hija de cinco años a la madre, quien cuenta con la custodia legal.
El reporte ingresó a las 22:00 horas al sistema de emergencias, donde la mujer identificada con las iniciales YACF informó que se encontraba afuera del domicilio de su exesposo, Silverio, quien impedía que la menor le fuera entregada y presuntamente portaba un arma de fuego. La llamada fue canalizada al programa Esmeralda, solicitando apoyo ante la actitud agresiva del sujeto.
Elementos de corporaciones municipales acudieron inicialmente al domicilio ubicado en el asentamiento humano antes mencionado; al intentar comunicarse con la reportante no obtuvieron respuesta, y en el inmueble nadie atendió el llamado. Vecinos consultados señalaron no haber escuchado disturbios en ese momento, por lo que la unidad se retiró tras documentar la visita.
Minutos después, personal de la Policía Investigadora de Delitos se trasladó nuevamente al lugar, donde esta vez logró entrevistarse con la madre de la menor, quien reiteró que su hija de inciales MLC había sido retenida por su padre desde horas antes. La mujer, de 26 años, explicó que cuenta con la custodia de la niña.
El hombre señalado, identificado como Silverio, de 30 años y soldado raso del 62 Batallón de Infantería, permanecía dentro del domicilio y continuaba negándose a entregar a la menor pese a la presencia de los agentes.
Debido a la condición del involucrado como militar activo, se solicitó el apoyo de la Defensa. Fue hasta que un mando militar habló con el soldado y le ordenó entregar a la niña a su madre.
Una vez asegurada la integridad de la menor, Silverio fue puesto a disposición de la Defensa, quienes asumieron el control de la situación conforme a su jurisdicción.
En cuanto al señalamiento de que el hombre portaba un arma de fuego, personal de la Policía Investigadora de Delitos, con autorización del propio Silverio y en presencia de militares, realizó una inspección en el domicilio, determinando que no se localizó ningún arma en el lugar.