Ventajas de conectar varios dispositivos a Internet y cómo conseguirlos

Con la llegada de la tecnología de redes, que nos ha permitido flujos de datos muy rápidos y ha elevado la experiencia de navegar por internet a un nivel superior, hace un par de años obtuvimos muchos otros beneficios como usuarios. Uno de ellos es la conexión de múltiples dispositivos a Internet.

Durante mucho tiempo, tener varios dispositivos, como smartphones, tablets, portátiles o ordenadores de sobremesa, e incluso televisores (que se han vuelto más inteligentes con el tiempo y cuyo uso más avanzado se basa en la conexión a internet), en una casa o apartamento con más miembros no ha sido una novedad. Es más, cada vez más usuarios optan por contratar un paquete de internet estable y rápido, preferiblemente fibra óptica, para que todos los miembros de la familia puedan usar sus dispositivos y disfrutar de contenido web de forma estable y rápida.

Logística de la conexión de múltiples dispositivos a Internet

En este caso, debemos prestar más atención a los detalles técnicos relacionados con la carga de la red al conectar varios dispositivos (especialmente para usuarios exigentes). En concreto, lo primero que hay que tener en cuenta es el flujo de datos; más concretamente, el flujo máximo que ofrece un dispositivo (router), en la mayoría de los casos, no es la velocidad óptima de internet, sino la velocidad de la conexión wifi.

¿Qué significa esto en la práctica? Supongamos que un router puede ofrecer unos 30 Mbps y que cada dispositivo conectado alcanza esa velocidad máxima. Cuantos más usuarios haya, la velocidad se distribuirá de forma diferente, independientemente de la velocidad de la conexión a internet.

También es muy importante mencionar la intensidad de la señal proveniente de un dispositivo de red, más precisamente, un router que permite el tráfico entre múltiples redes informáticas. Dependiendo de la configuración del espacio donde se alojan las personas, es fundamental contar con un dispositivo Wi-Fi potente que pueda proporcionar una señal suficientemente buena en un área más amplia en todo momento.

Aquí llegamos a otro elemento importante: el llamado punto de acceso. ¿De qué se trata realmente? Si se pretende aumentar el número de dispositivos conectados a internet, concretamente a la red inalámbrica (ya sea en casa o en el trabajo), es necesario integrar un dispositivo Wi-Fi adicional para un mejor punto de acceso. De esta forma, se podrá reducir la carga del router principal, y la integración de otro router o del punto de acceso mencionado en la red local contribuye significativamente a su descarga.

¿Qué importancia tiene la óptica en este caso?

Al configurar un router que cubra un área específica, se pueden conectar fácilmente varios dispositivos a una misma red Wi-Fi que, por ejemplo, proporciona datos a través de un cable óptico. En ese caso, esta tecnología contribuye a garantizar el mayor flujo posible, de modo que la velocidad se distribuya de forma uniforme y estable entre todos los dispositivos.

Por lo tanto, en casa, la velocidad ideal podría ser de hasta 40-50 Mbps, lo que es más que suficiente para el uso ininterrumpido de operaciones más exigentes en la web, mientras que para condiciones comerciales, sin embargo, debe elegir los paquetes más fuertes posibles con tasas de datos más altas en la unidad de tiempo, dado que una red Wi-Fi será utilizada por muchas más personas a la vez.

Supongamos que tienes conectados dos ordenadores, un televisor y dos teléfonos en un apartamento a tu red doméstica. Parece fantástico que cada miembro de la familia use internet para diferentes propósitos sin problemas. Sin embargo, ¿dónde puede surgir un problema si tienes una red inestable? Hoy en día, casi la mayoría de los vídeos en internet son en 4K, lo que de por sí consume muchos datos. Además, existen servicios de música en línea, servicios de vídeo en línea, juegos en línea, apuestas deportivas en una de las plataformas calificadas por un experto en apuestas, a través de transmisiones en directo y seguimiento de las cuotas en directo, y muchas otras opciones.

Todo esto no sería posible en tiempo real y al mismo tiempo si el router no proporciona altas velocidades de datos en una conexión estable. Precisamente por estas razones, el cable de internet de fibra óptica (del que cada vez se habla más) se está convirtiendo poco a poco en un estándar tanto para el usuario común como para las empresas que hoy en día no pueden concebir su trabajo sin fibra óptica. Este tipo de internet es ultrarrápido, ofreciendo velocidades de hasta 1000/400 Mbps.

Conclusión: El desarrollo de la tecnología y de las soluciones tecnológicas está avanzando mucho hoy en día, pero trae consigo ciertos requisitos de hardware e infraestructura que deberán soportarlo.