Zoológico pide donar mascotas vivas para ser sacrificadas como alimento para otros animales
El Zoológico de Aalborg, ubicado en el norte de Dinamarca, ha desatado una ola de críticas tras solicitar públicamente la donación de mascotas para alimentar a sus animales carnívoros. La convocatoria, difundida a través de redes sociales, invita a entregar animales como gallinas, conejos, cuyes e incluso caballos que ya no sean deseados por sus dueños. Aunque la iniciativa lleva años en práctica, su reciente visibilidad ha puesto en entredicho la ética detrás de esta política alimentaria.
Según voceros del recinto, el objetivo es replicar lo más fielmente posible la dieta natural de especies como tigres, leones, linces y otros carnívoros, ofreciéndoles presas completas, con pelo, huesos y órganos. La subdirectora Pia Nielsen explicó que la estrategia permite conservar comportamientos instintivos, al tiempo que se garantiza la salud nutricional de los ejemplares.
El zoo dejó claro que no acepta mascotas enfermas ni animales que hayan recibido medicamentos recientemente, y en el caso de los caballos, se requiere un pasaporte equino y certificación sanitaria. Las condiciones, aunque específicas, no han impedido que decenas de ciudadanos, e incluso criadores, participen en el esquema, argumentando que prefieren un destino ‘útil’ para los animales antes que la eutanasia convencional.
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Una publicación en redes que fue polémica
La publicación original recibió una avalancha de comentarios negativos, muchos de ellos desde el extranjero, pues mientras en Dinamarca esta práctica no es ilegal ni excepcional, fuera del país se ha interpretado como una medida cruel o sensacionalista. El zoológico se defendió afirmando que se trata de un enfoque ético y ecológico que prioriza tanto a los animales donados como a los que permanecen en cautiverio.
De acuerdo con reportes de medios locales, el recinto mantiene acuerdos con propietarios rurales y centros de rescate que permiten canalizar animales sanos al programa. En visitas educativas, el zoo explica la dinámica como parte de su misión para simular procesos de caza y nutrición en ambientes controlados.
La controversia ha motivado el seguimiento de autoridades veterinarias y asociaciones de bienestar animal, que evalúan si el procedimiento respeta lineamientos europeos. Hasta el momento, no se han emitido sanciones ni recomendaciones oficiales, aunque el caso sigue siendo observado por entidades internacionales.
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