Sus hombres también compartían con él su fervor religioso. Uno de sus sicarios, más joven del grupo, prefirió matarse a ser capturado. Cuando fue revisado su cuello tenía un rosario.
Sus hombres también compartían con él su fervor religioso. Uno de sus sicarios, más joven del grupo, prefirió matarse a ser capturado. Cuando fue revisado su cuello tenía un rosario.Cuernavaca, Morelos.- Arturo Beltrán Leyva, uno de los líderes del Cártel que llevaba su apellido, además de morir entre miles de dólares, artículos de lujo y armas, como reza el estereotipo del narcotraficante, también iba acompañado de símbolos religiosos. EFe, Notimex, El Universal. 17 de Noviembre de 2009.
publicada el 17 de diciembre de 2009