Fuera, proyecto del relleno
El municipio de Canatlán no alcanzó a ingresar el proyecto para la construcción de un nuevo relleno sanitario para la cabecera municipal, que resuelva el problema de basura que se tiene en la actualidad.
La alcaldesa, Dora Elena Gonzáles Tremillo, explicó que buscarán que el proyecto tenga recursos para su ejecución en 2019, último año de su administración.
Sin embargo, reconoció que en el caso del relleno sanitario para la cabecera, además del reto financiero y logístico, es necesario implementar una campaña de sensibilización con la ciudadanía para disminuir los índices de rechazo.
Y es que dijo, los habitantes se cierran a cualquier posibilidad en el momento en el que escuchan el tema de la reubicación del relleno sanitario, ya que lo consideran un riesgo para sus viviendas.
Canatlán fue uno de los municipios en los que se construyó un relleno sanitario en administraciones anteriores, sin embargo la operación se vio afectada debido a la ubicación.
Los señalamientos han sido recurrentes en torno a que la operación del basurero podría incluso contaminar los mantos freáticos de la zona.
Por ello, el gobierno municipal tomó la decisión de regresar la gestión de residuos al anterior relleno, para evitar que haya daños al ambiente.
No obstante, el hecho de que el relleno opere como tiradero al aire libre lo ha convertido en un foco de infección para los habitantes que viven en las cercanías al lugar.
Pero no solo eso, a inicios del año, el basurero se vio envuelto en una serie de incendios que incrementaron el grado de contaminación en la zona y pusieron a las autoridades de Protección Civil en alerta ante la posibilidad de que el fuego alcanzara las viviendas cercanas.
Luego de los incidentes, el Ayuntamiento tomó la decisión de rehabilitar una caseta de vigilancia en la zona del tiradero para inhibir la probabilidad de un nuevo incendio en el área.
NUEVO ESPACIO
Luego de los incidentes, la posibilidad de gestionar ante la Secretaría de Recursos Naturales y Medio Ambiente (SRNyMA) recursos para la construcción de un nuevo relleno, tomó mayor relevancia.
Sin embargo, los recursos en la dependencia estatal son limitados, toda vez que la red de rellenos sanitarios a nivel municipal no ha terminado de cerrarse.
Debido a que el rechazo al proyecto es uno de los retos que enfrenta el municipio, el Ayuntamiento tomó la decisión de incluir el relleno entre las propuestas que se trabajan en un esquema de gobierno abierto, a fin de que la ciudadanía conozca las implicaciones, tanto a favor como en contra.
Sin embargo, el municipio deberá esperar hasta el año siguiente para determinar si el proyecto se arranca o no en lo que falta del trienio actual.