Pese a los reiterados avisos y acuerdos para evitar la comercialización de pirotecnia, hay vendedores que todavía incurren en esta práctica.
Durante el operativo de verificación implementado en la romería del Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, personal de la Dirección Municipal de Inspección detectó un puesto en el que se vendían diferentes artefactos pirotécnicos. Esto a pesar de que en el dictamen aprobado por el Cabildo, en coordinación con los líderes de comerciantes, se acordó que estaba estrictamente prohibida este tipo de mercancía.
De hecho fue después que los Inspectores ubicaron a un grupo de niños jugando con algunos artefactos y se acercaron a revisar en la zona, punto en el que ubicaron a una persona vendiendo diferentes artículos a base de pólvora, los cuales de inmediato fueron asegurados.