Debilitar las instituciones

En las pocas semanas que lleva el nuevo gobierno, tenemos ya varios ejemplos de cómo se debilitan las instituciones para hacerlas afines a los deseos del nuevo régimen.

Institución por institución, se van dando los cambios para que las instituciones, especialmente las que tienen autonomía constitucional, no sean un contrapeso al poder presidencial. No importa si la incompetencia de los nominados a integrar un organismo que tiene autonomía constitucional, hace que no alcancen la mayoría calificada en la Cámara de Senadores, al final se eligió a quienes demuestran lealtad al gobierno en turno.

La propuesta de cambios a la ley que regula a la mayor empresa productiva del estado, Pemex, va en el sentido de aumentar el poder de su Director General, nombrado por el Presidente de la República, en detrimento del Consejo de Administración de la empresa. Incluso, tres consejeros independientes han anunciado su salida antes de la fecha en que termina su encargo por diferencias con la forma en que se conduce en la empresa.

También dejará de existir el organismo encargado de la evaluación de los docentes y de la calidad de la educación en nuestro país, una vez que se concrete la abrogación de la reforma educativa aprobada durante el sexenio de Enrique Peña Nieto.

Sin embargo, la propuesta de aumentar la Suprema Corte de Justicia de la Nación con 5 nuevos ministros, es la apuesta más alta que ha hecho este gobierno para conseguir mayoría en una institución que, por los 15 años que duran los Ministros en su cargo, es imposible que algún Presidente consiga imponer a tantos integrantes como para inclinar la balanza a su favor en algún litigio que sea de interés para el gobierno.

Si la reforma constitucional para aumentar los asientos en la Suprema Corte de Justicia de la Nación llega a concretarse, a partir del año 2021, en que se retira el Ministro José Fernando Franco Gonzáles Salas, el ejecutivo federal habrá nominado a 8 integrantes de nuestro máximo tribunal constitucional, con lo que tendría una influencia sobre las decisiones de este órgano colegiado.

La construcción de instituciones fuertes, que funcionen como contrapesos a los otros poderes constituidos va en el sentido de una democracia que ofrezca a los ciudadanos mejorar su calidad de vida. Lamentablemente, en las pocas semanas que llevamos del nuevo gobierno, vemos que las decisiones van en el sentido contrario, debilitando a las instituciones para evitar que generen contrapesos al poder que ha venido acumulando el Presidente de la República.

Twitter: @jesusmenav