Comer una manzana no quita el sueño

Desde hace bastante tiempo se ha mencionado o se tiene la idea que comer una manzana al día despierta más que tomar un café, situación que ya ha sido desmentida, y tiene un por qué.

Una taza de café es mejor para despertar, ya que la cafeína, sin aportar kilocalorías, tiene unos efectos claros sobre el sistema nervioso y sobre nuestro metabolismo, con lo cual ayudará a mantenerse más atentos. Por su parte, la manzana aporta hidratos de carbono que permitirán disponer de niveles de glucosa estables en la sangre durante varias horas, lo mismo que harían una pera, unas ciruelas o un trozo de pan integral.

La cafeína es una sustancia que aporta energía al organismo, es ergogénica. Es una sustancia que estimula el sistema nervioso central y por eso aporta energía y hace sentir menos cansancio y menos sueño.

Lo mismo ocurre con el té, bebidas como la Coca Cola (aunque no es recomendable su consumo por muchos otros factores) o similares que contienen cafeína y el chocolate.

Es un alimento de bajo índice glucémico, es decir, la elevación de los niveles de glucosa en sangre es gradual y no produce elevados picos de glucosa, con lo cual contribuye a mantener los niveles estables de glucosa hasta la siguiente comida y ayudará a evitar tener sensación de hambre y falta de energía.

Comer una manzana en el desayuno aporta energía y menos ganas de comer pero no quita el sueño como lo hace el café.

Pero aunque no sirva para no quedarse dormidos, las manzanas tienen muchas propiedades beneficiosas para nuestro organismo. Es más, es aconsejable comer una manzana cada día para el buen funcionamiento del cuerpo.