San Pedro Sula, al norte de Honduras, vive este martes un caos con enfrentamientos con la Policía Nacional, que trata de dispersar con gases protestas de una facción de maestros y médicos, quienes iniciaron hace seis días un paro nacional en rechazo a dos polémicos decretos que consideran lesivos a sus intereses, a pesar de que ya fueron derogados.
Los incidentes violentos iniciaron cuando los policías lanzaron gas lacrimógeno para dispersar a los manifestantes que bloqueaban un bulevar en San Pedro Sula, la segunda ciudad más importante del país centroamericano.
En la protesta participan maestros y médicos del sector público, en paro indefinido inicialmente para reclamar la derogación de dos decretos relacionados con salud y educación, lo que el Gobierno de Juan Orlando Hernández aprobó el domingo en un Consejo de Ministros.