Las familias victorenses ya se alistan para la tradicional celebración del Día de los Fieles Difuntos, tal y como año tras año dicha festividad se ha ido pasando generación tras generación. El camposanto municipal San Pedro de los Ángeles es el espacio al que cientos de personas acudirán desde el jueves 31 y viernes 1 de noviembre para realizar la limpieza de tumbas, pero la mayor afluencia será el sábado 2 de noviembre, cuando la tradición marca el Día de Muertos.
Así las familias realizarán la acostumbrada visita a las tumbas de los seres queridos que han fallecido, pues la costumbre ancestral en nuestro país dicta que recordemos el 2 de noviembre a quienes se nos adelantaron en el trayecto de la vida.
Ahí en el Panteón Municipal se llevara a cabo la celebración de la misa al mediodía, oficiándola el párroco Raymundo Santillán Villa, de la Parroquia Santa María de Guadalupe.
También la parte comercial se alista con los productos solicitados para esta celebración, en especial los comerciantes dedicados a la venta de flores, artificiales y naturales así como las coronas con flores de papel y plástico estarán ofreciendo su mercancía en el tianguis de la flor que se instala desde el 31 por la tarde en la avenida Morelos y Felipe Ángeles, en el centro de la ciudad, a unos pasos de la Parroquia Santa María de Guadalupe y el mercado.
Por ello el acceso vial se vuelve complicado dada la venta de las flores. La ofrenda de flores que se otorga a los difuntos, ya sean gladiolas y pompones, los más caros por cierto, y económicos el cempoal y garra de león, las cuales adornarán las tumbas.
Las autoridades municipales, por su parte, realizan trabajos de limpieza y mantenimiento del panteón con el corte de hierba, fumigación y limpieza de andadores. También se han revisado las áreas para que no haya peligro de picaduras de abejas. Han avisado que los visitantes podrán contar con los servicios de agua, recolección de basura, iluminación así como sanitarios públicos portátiles.