Piden edificar un rastro regional en Cuencamé
Considerando que, en la comunidad Cuauhtémoc, perteneciente al municipio de Cuencamé, no existen instalaciones adecuadas para el sacrificio de ganado, el Consejo Directivo de la Asociación Ganadera del Sur de esta demarcación demanda la construcción de un rastro regional ya que el local que se utiliza actualmente no cumple con las normas mínimas de salud ni para el manejo de la carne.
De esta forma lo expresó Vicente Victorio Robles, en su carácter de integrante de dicha Asociación, tras precisar que desde hace años se ha planteado la edificación de un rastro regional que dé servicio tanto a los productores pecuarios que se dedican a la crianza de ganado así como a los habitantes en general, pues el inmueble donde se sacrifica a los animales funciona de manera inadecuada.
"Actualmente se sacrifica al ganado sin ningún control epidemiológico en un cuartito, que ya tienen casi 40 años matando a los animales en ese cuartito, por lo que creemos que es importante que las autoridades correspondientes, ya sea estatales o federales, revisen las condiciones en las que se está trabajando, porque se corren riesgos en varios aspectos", complementó el entrevistado.
Por ejemplo, citó que en esas reducidas instalaciones donde actualmente se mata ganado no se cuenta con un médico veterinario asignado por la Secretaría de Salud, por la Jurisdicción Sanitaria, que esté al pendiente de los procedimientos que se desarrollan en el sacrificio del ganado, de tal forma que se cumpla con las medidas mínimas de higiene.
Refirió además que a pesar de que en la Asociación Ganadera se expiden guías de tránsito, no se puede comprobar posteriormente que una o varias reses vayan al sacrificio, debido a que ese pequeño inmueble no está registrado como rastro, aun cuando todos los días los habitantes de la región llevan a sus reses para ser sacrificadas.
Victorio Robles indicó también que son más de 10 los encargados o propietarios de carnicerías los que utilizan diariamente los servicios que ofrece ese inmueble, al que también en lo individual recurren los habitantes de Cuauhtémoc y de otras nueve localidades aledañas, lo que en ocasiones genera una gran fila en espera de que le asignen un turno para su atención.
Esta situación se complica, señaló, durante el mes de diciembre de cada año, ya que mucha gente acostumbra llevar también cerdos para su sacrificio, pues en esta temporada es común que se realicen fiestas familiares en las que la carne de dichos animales tiene una gran demanda.