La mató porque no quiso ir de fiesta

Este jueves se reveló la causa por la que una mujer del municipio de Santiago Papasquiaro fue degollada por su concubino. El hombre se enojó porque ella no quiso ir a una fiesta, por eso le asestó varios golpes en el cuello con un arma blanca.

La Fiscalía General del Estado (FGE), fue la instancia que aportó dicha información, ya que anunció el cierre de la investigación sobre el caso, en el que se confirmó que el homicida fue Mauro Alberto Rodríguez López.

Asesinó a Mercedes Alejandra Godínez Jáquez, de 34 años de edad, quien era su pareja sentimental.

De acuerdo con la carpeta de investigación, el 12 de febrero pasado, Mauro Alberto se enojó hasta el punto de matarla, porque la mujer no quiso salir con él.

Ese día, el homicida llegó a casa, en Santiago Papasquiaro, para pedirle a Mercedes Alejandra que fueran a una fiesta, pero ella lo rechazó.

Según la Fiscalía, familiares de la mujer sospechaban de Mauro Alberto, temían que hubiera actuado contra ella, así que fueron a la vivienda.

Al llegar tuvieron que forzar la puerta porque nadie respondía, fueron policías quienes ayudaron para ingresar al domicilio.

Elementos de seguridad y familiares quedaron sorprendidos al encontrarla tendida en el suelo con varias heridas de arma blanca en el cuello.

Inmediatamente la trasladaron a la clínica de la localidad, en donde al poco tiempo murió desangrada por las heridas que le causó su concubino.

Mauro Alberto quedó como presunto responsable y a unas cuadras fue detenido por policías estatales quienes lo entregaron al Agente del Ministerio Público.

Lo encarcelaron mientras se desarrollaba el proceso para determinar el castigo del delito que se inscribió como homicidio agravado, mismo por el que, el Juez determinó un castigo de 12 años de prisión, una multa por 121 mil 665 pesos, además de 427 mil 519 pesos como reparación del daño.

Sobre la tipificación de este delito, este medio de comunicación solicitó información al Tribunal Superior de Justicia del Estado de Durango, ya que pese a que el crimen presenta características propias de un feminicidio, no fue considerado así.

Por ejemplo, la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres, indica que uno de los rasgos feminicidas es que "existan antecedentes o datos de cualquier tipo de violencia en el ámbito familiar, laboral o escolar, del sujeto activo en contra de la víctima; que haya existido entre el activo y la victima una relación sentimental, afectiva o de confianza".

Como se presentó en este caso, que no obstante, se calificó como homicidio agravado.