Ari Telch regresa con 'D’Mente'
Ari Telch hizo de la risa su aliada para romper tabúes; para hacer que Durango dejara de temer al uso de palabras como “Psiquiatra”; para que se reconociera que una enfermedad mental no es cosa de otro mundo.
Fue “D’Mente”, monólogo a cargo del actor mexicano que este miércoles reunió a cientos de duranguenses en el Teatro Ricardo Castro.
Apareció con su peculiar estilo. Lo primero, narrar la enorme travesía para llegar aquí: desde enfrentar el tráfico de la “selva urbana”, quedarse sin gasolina, un intento fallido al subir a un taxi, hasta una aventura en el microbús y así poder abordar el avión que lo trajera de vuelta a “la tierra” del general Pancho Villa.
“De aquí todos van a salir enfermos mentales”, dijo Ari, una advertencia que llegó acompañada de cifras fuertes: 400 trastornos mentales clasificados y 37 de cada 100 personas padecen o padecerán alguno de ellos en un punto de su vida.
Pero antes de entrar a fondo, de abordar algunas de ellas, era necesario entender conceptos básicos como “Mente”, que definió como la “Potencia intelectual del alma”. Luego una breve explicación de cómo funciona el cerebro y, después, una reflexión clave: Cómo es posible que en pleno siglo XXI todavía se le tenga miedo a un psiquiatra.
No fue una cátedra, fue un espectáculo lleno de música, de muchas risas, “chistes malos” y otros “no tanto”, también de anécdotas reales que provocaron silencios incómodos y duros, pero que quedaron como “anillo al dedo” para demostrar que la insensibilidad y la ignorancia son los grandes enemigos a vencer en estos tiempos donde hace falta entender que el 80% de las muertes por consumo de sustancias son provocadas por el alcohol y cigarro; que 360 millones de personas sufren esa enfermedad silenciosa llamada depresión; que el suicidio es la segunda causa de muerte juvenil; que Marilyn Monroe, Robin Williams, Avicii o Amy Winehouse tenían todo menos salud mental; que era posible que muchos de los presentes padecieran un “desorden en la química de su cerebro” y que después de esa noche, que luego de “D’Mente” habría una oportunidad, si es que querían tomarla, de recuperar su paz.
“Nos veremos pronto. Amenaza”, culminó Telch.