Se va cerrando el cerco que envuelve a Fox, Calderón y Peña Nieto
Fue aprehendido ayer en Dallas, Texas, Genaro García Luna, quien fungió como secretario de Seguridad Pública en el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa y titular de la Agencia Federal de Investigación en el sexenio de Vicente Fox Quesada; fue pieza clave en el presunto combate al narcotráfico en ambos sexenios, aunque con resultados nefastos. En Estados Unidos, García Luna está acusado de tres cargos por conspiración de tráfico de cocaína y uno más por declaraciones falsas, mientras que en México tendría procesos judiciales iniciados por vínculos con el crimen organizado.
Ayer se hizo pública la acusación en contra del otrora poderoso "superpolicía", por parte de la Corte de Brooklyn, Nueva York, la misma en donde fue enjuiciado Joaquín "el chapo" Guzmán recientemente. El fiscal estadunidense para el distrito este del estado neoyorquino, Richard P. Donoghue, aseguró que García Luna está acusado de haber recibido millones de dólares en sobornos de parte del cártel de Sinaloa mientras controlaba la Policía Federal mexicana y mientras era responsable de la Seguridad Pública.
García Luna tramitó una solicitud de naturalización en el 2018 desde Florida, donde vivía desde el principio del sexenio de Enrique Peña Nieto, y ahora se le acusa de haber mentido acerca de su involucramiento con cárteles mexicanos. De ser comprobado el cargo de conspiración para tráfico de drogas, enfrentaría una sentencia mínima de diez años de prisión y una máxima de cadena perpetua.
La condición actual de García Luna es por demás comprometida y necesariamente involucra a sus exjefes directos y protectores a ultranza, Vicente Fox y Felipe Calderón, quienes nunca lo tocaron ni investigaron, pese a los señalamientos de corrupción y turbios manejos que comenzaban a salir a la luz. De hecho, su detención podría estrechar el cerco para ambos expresidentes y, de paso, para Peña Nieto. Fuentes internas de la Fiscalía General de la República filtraron ayer a un diario nacional que tiene, además, varias carpetas de investigación en su contra por parte de la justicia mexicana.
Y no es la primera vez que se menciona a los expresidentes: como se recordará, en el juicio contra "el chapo" Guzmán, diversos testigos juramentaron que tanto Fox como Calderón recibieron sobornos de cárteles de las drogas y el conducto fue, precisamente, Genaro García Luna. Con Calderón se convirtió en el "hombre fuerte" del sexenio y su influencia fue superior a la de cualquier otro funcionario del gabinete de Seguridad, así como de la política interna, por encima del secretario de Gobernación.
Así las cosas, esta captura podría ser, hasta hoy, la más significativa para el gobierno federal, la de más alto nivel, aunque no la hizo México, sino, para no variar, Estados Unidos. Por otro lado, están en marcha las diligencias legales que pueden llevar a la aprehensión de otros exfuncionarios del pasado inmediato, como Emilio Lozoya, los hijastros de Vicente Fox, entre otros.
Es muy posible, pues, un seguimiento puntual a una serie de investigaciones que exponen la corrupción de los últimos tres sexenios y de quienes lo permitieron, solaparon y se beneficiaron de ello, o sea, los expresidentes, que deberían ser llamados a cuentas por las acciones de sus subalternos o allegados.
En la historia de México todavía no se ha procedido legalmente contra ninguno de ellos; tan seguros han estado de irse en la impunidad, que siguen viviendo en territorio mexicano, excepto por Peña Nieto, pero se supone que podríamos estar cerca de un cambio al respecto, lo cual daría credibilidad a la lucha de este gobierno contra la corrupción.
Entonces, si durante el régimen de Andrés Manuel López Obrador no se procede penalmente contra ninguno de los tres últimos exmandatarios, se estaría faltando a uno de los compromisos esenciales de su campaña electoral. Y hay mucha tela de dónde cortar. Eso es seguro.
EN OTRO INTENTO de show mediático, los dos regidores del Partido del Trabajo acudieron a la Dirección Municipal de Finanzas a devolver el 30 por ciento del salario correspondiente a su última quincena "para contribuir al mejoramiento de las finanzas de nuestro municipio"... TAL VEZ SU pretendido gesto de nobleza llame la atención de Laura Bozzo, pero en Durango ya no adquieren relevancia los petistas y sus acciones, porque un día respaldan a un grupo de vecinos fuera de la legalidad y les obsequian un "nacimiento navideño" y al día siguiente chantajean con donaciones salariales. Por estas y otras cosas pierden seriedad los políticos ante la ciudadanía... CONFORME AVANZAN LOS días, comienza a volverse muy difícil circular por el centro histórico debido a la temporada de compras, en especial en el área del mercado Gómez Palacio, donde se requiere, como siempre, un operativo permanente de Seguridad Pública municipal para evitar cualquier percance.
Twitter @rubencardenas10