
Enrique Iglesias 'apaga' la fiesta
La Feria Nacional Durango 2018 terminó. El cierre no se vivió en la Velaria, ni en el Palenque, ni en los varios escenarios internos; fue en el segundo estacionamiento del propio recinto.
La ausencia de carros pasó desapercibida ante los 30 mil asistentes, cifra oficial, que esperaban de pie, frente a un enorme escenario, la salida de quien fuera el artista más esperado de esta edición, Enrique Iglesias.
De sangre española, nacido en los escenarios, hijo de un icono de la música romántica que le heredó la pasión por esta profesión (Julio Iglesias), Enrique se presentó por primera vez en esta ciudad.
9:33 PM. El 'show' comenzó. Luces láser jugaron con los ritmos de "I'm a freak" y con la entrada enérgica del intérprete.
Los temas en inglés predominaron la parte inicial. 'I like how it feels' y 'Heartbeat' fueron los siguientes. De sus recientes éxitos sonaron 'Duele el corazón' y 'Bailamos', éste último con una fusión de sonidos de su natal España y parte de 'Shape of you' de Ed Sheeran.
Otro pequeño escenario se colocó en el centro del lugar. Enrique corrió hacia él. Se hizo acompañar de cuatro músicos y una vocalista para iniciar un set acústico.
"Muchas gracias, Durango, sobre todo porque llegué aquí a las cinco de la tarde y todos vosotros y vosotras ya estaban ahí sentados, mil gracias. ¡Felices fiestas!", dijo al público mientras los acordes de 'El perdedor' sonaban de fondo.
"¡Gracias! Y perdón si lo vuelvo a decir, pero gracias por estar aquí... Si no fuese por esta próxima canción hoy no tendría dos bebés de siete meses", compartió para luego cantar 'Loco'.
También recordó ese famoso dueto que hizo junto a Juan Luis Guerra, 'Cuando me enamoro', mientras que 'El baño', 'Tonight' y 'Súbeme la radio' retomaron los ritmos movidos en la fiesta al aire libre.
El español jugó con las emociones. De temas movidos regresaba a la balada. Así presentó un set conformado por uno sus clásicos 'Héroe', 'El perdón' y 'Bailando', para luego llevar a todos a la cúspide con 'I like it', la última de la noche.
Para Enrique no hubo límites si de abrazar y estar cerca de sus fans se trataba. En repetidas ocasiones bajó del escenario y hasta brincó vallas de seguridad para responder a las muestras de cariño del público.
Por una hora y media recibió rosas, peluches, besos, abrazos, piropos, ovaciones, pero sobre todo el cariño de sus seguidores que ayer dijo adiós a su feria, en espera de dejarse sorprender por la edición 2019.