La inteligencia como método para transformar la información
Entendiendo la Inteligencia como la especialidad que se dedica a sistematizar la recopilación, la evaluación y el análisis de información "comprobada" para transformarla en elementos de juicio "muy cercanos a la verdad," resulta menguada cuando el o los tomadores de decisiones, no tienen claridad sobre donde y cuando deben decidir ni lo que quieren alcanzar.
La Inteligencia tiene injerencia en todas las especialidades de la Diplomacia, el Desarrollo y la Defensa Nacionales. Y para cumplir con el manejo de los insumos y los procesos que le dan su razón de ser, actúa en dos vertientes:
La Temática, que involucra las instancias estatales y no estatales que intervienen en la política, el ejecutivo como responsable de la Administración Pública, el legislativo como responsable de generar el marco jurídico que norma el comportamiento individual y colectivo y el judicial, que verifica el cumplimiento de este orden jurídico; en las sociales, como la atención a la pobreza, el hambre, salud, educación, trabajo; en las económicas, como energía, industria, producción, comercio, por señalar algunos temas. Y la Geográfica que considera los tres órdenes de gobierno de nuestro país: Federal, Estatal y Municipal para cubrir todo el territorio nacional.
La Inteligencia tiene una Jerarquización, congruente al nivel donde se desenvuelve. La Inteligencia Estratégica nutre la Política de Seguridad Nacional, actuando al interior y al exterior del país, identificando antagonismos que afecten los objetivos nacionales, tanto los de nuestra constitución, como los de la Visión Estratégica del presidente de la Republica en funciones, establecidos en su Plan Nacional de Desarrollo.
Cuando la Inteligencia Estratégica identifica vulnerabilidades o debilidades que pueden ser solucionadas con acciones políticas o administrativas, el problema se mantiene en un nivel de riesgo permisible para ser corregido y retomar el camino hacia los fines mencionados.
Cuando se vuelve amenaza por el crecimiento del riesgo mal atendido, contener su avance requiere el empleo oportuno, razonado, proporcional, legítimo y legal de las capacidades del estado (Poder Nacional).
La Inteligencia Operativa, atiende problemas temáticos que se presentan en espacios geográficos definidos, por lo que muchas veces son solucionados por los Gobiernos Libres y Soberanos de las entidades federativas, en coadyuvancia con sus Municipios Libres, que no autónomos como en ocasiones se menciona, en coordinación y colaboración del gobierno federal y de los estados colindantes, para evitar la expansión de antagonismos.
La Inteligencia Operativa es vinculante con la Inteligencia Estratégica, detectando información que incida o pueda incidir en los fines de la Seguridad Nacional, la Inteligencia Operativa se enfoca a la información que afecta o puede afectar los objetivos de la Seguridad Interior y el desarrollo regional, siempre tratando de evitar su escalamiento como antagonismo a la Seguridad Nacional.
La Inteligencia Táctica es la que busca identificar las vulnerabilidades y debilidades en la aplicación de los medios y recursos del estado nacional en un espacio geográfico definido, y son las tareas de la Seguridad Publica como la Prevención, empleando medios no coercitivos, la participación ciudadana y labores policiales que atiendan el comportamiento individual y colectivo con el fin de recuperar, mantener y fortalecer la convivencia sana; la persecución del delito y la Procuración de la Justicia, cumpliendo y haciendo cumplir la ley, la impartición de Justicia y las ocupaciones inherentes a la Reinserción del infractor.
El gran problema que se confronta, es cuando todas las instancias de Inteligencia operan en el terreno y hacen recopilación, análisis y explotación del producto de inteligencia, en la mayoría de los casos sin coordinación entre ellas, es el caso de las instancias de seguridad y justica Federales, Estatales y Municipales, donde todas actúan contra crimen organizado, desnaturalizándose al soslayar las atribuciones sustantivas que les corresponden y, al no medir la capacidad del adversario, lo único que se consigue es la cooptación de las dependencias y órdenes de gobierno más débiles.
No hay forma de aprender por ensayo y error, la actuación de la autoridad, siempre se mide por los resultados y hasta el momento, se evidencia un manejo inadecuado de la Inteligencia en la Toma de Decisiones.